LA CONDENACIÓN / 2

ESTUDIO BÍBLICO

Marcos 12:38-40.

38Y les decía en su doctrina: Guardaos de los escribas, que gustan de andar con largas ropas, y aman las salutaciones en las plazas, 39y las primeras sillas en las sinagogas, y los primeros asientos en las cenas; 40que devoran las casas de las viudas, y por pretexto hacen largas oraciones. Estos recibirán mayor condenación.

Jesús pone el ejemplo negativo de algunos escribas que buscaban en reconocimiento público y que luego intentan dar rienda suelta a sus concupiscencias, diciendo que estos obtendrían una mayor condenación, lo cual nos hace pensar que también en la condenación habrá diferentes posiciones.

Santiago 3:1.

1Hermanos míos, no os hagáis maestros muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación.

Una vez más la Palabra nos habla de mayor condenación, poniendo ahora una condición peligrosa en el hombre, el ser maestro, que no quiere decir que no aceptemos el ministerio de maestro, sino que no seamos maestros de nuestras cosas. Muchos han enseñado doctrinas distintas de las que el Señor puso en su Palabra produciendo condenación hacía ellos y sus seguidores.

Tito 3:10-11.

10Al hombre que cause divisiones, después de una y otra amonestación deséchalo, 11sabiendo que el tal se ha pervertido, y peca y está condenado por su propio juicio.

Hay actitudes de personas que les ponen en una posición de condenación y una de ellas es la de causar divisiones, ya sea por matices doctrinales o por magnificar los defectos y los errores de unos contra otros en lugar de procurar la paz y el entendimiento.

Mateo 13:49-50.

49Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles, y apartarán a los malos de entre los justos, 50y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

Tenemos que tener claro que al final del tiempo viene el juicio de condenación a este mundo, por ello debemos de procurar ser hallados dignos para no caer en ella.

Pr. Ramón Ubillos