LOS DEMÁS

 

Jesús nos dejó la enseñanza de lo que verdaderamente importa: ser fieles y obedientes al Padre. Todo lo demás es producto de lo que podríamos llamar la naturaleza humana.

Por eso al Hijo de Dios no le importaron las críticas que recibió por haber participado en comidas con publicanos o por visitar a quienes según la sociedad, no debía visitar.

Él asumió con absoluta rotundidad su papel y no le importaron las críticas y las opiniones, porque el fin último es establecer el Reino y su Justicia y todo lo demás es accesorio.juicio2

Cuando nos declaramos discípulos del Maestro debemos asumir que también tenemos que obrar como Él obró, es decir sin dejarnos influir por las opiniones de los demás.

Esto significa no vivir condicionados por los criterios de los demás, por sus juicios o por sus críticas. Lo importante es ser fieles a las enseñanzas recibidas.

En determinadas ocasiones y ante los hechos más irrelevantes nos sumimos en auténticos problemas porque nos detenemos a pensar, que pensarán los demás de nuestros pensamientos.

Los que nos llamamos hijos de Dios y discípulos de Jesús debemos comportarnos siempre como tales y dejar de vivir pensando en los juicios de los demás. Lo que importa es el único Juicio, el Final.

Salmos 72:2
Diego Acosta García

REBELDÍA

 

Probablemente una de las características que definan a los seres humanos es la natural tendencia a la rebeldía que asumimos prácticamente desde que somos pequeñas criaturas.

La rebeldía la advertimos en los gestos de esos niños que son absolutamente dependientes de todo para vivir, pero que sin embargo son capaces de tener actitudes sorprendentes.

Este comportamiento se puede apreciar en menor o en mayor grado, pero existe siempre, a pesar de que no sea tan notorio en el fondo todos sabemos que alimentamos la rebeldía.

Con qué podemos vincular la rebeldía? Seguramente con nuestra voluntad de demostrar obedienciaque somos capaces de administrar todos los tiempos de nuestra vida.

Creemos que somos más que idóneos para tomar las decisiones correctas en el momento correcto y que no precisamos ninguna clase de autoridad sobre nosotros.

Si confrontamos nuestras actitudes con las de Jesús advertiremos nuestro tremendo error. Jesús siendo Dios se sometió como Hijo al Padre, para darnos un grandioso e irrepetible ejemplo de obediencia.

Si deseamos cambiar el rumbo de nuestra vida y acercarnos más y más al Señor, abandonemos la rebeldía que alentamos en nuestros corazones y seamos obedientes en el orden más elevado de su significado.

Romanos 5:19
Diego Acosta García

RENUNCIA

Un día, como hoy por ejemplo, podríamos plantearnos un gran cambio de actitud: Renunciar por voluntad propia a todos nuestros proyectos y presentarnos frente al Señor libres de esas ataduras.

Esto significa que también renunciamos a los logros que podríamos obtener con nuestras supuestas capacidades o con las ayudas de nuestros amigos, conocidos o benefactores.

Qué ocurriría si un hiciéramos esto? Seguramente estaríamos más cerca que nunca de soberano5nacer verdaderamente de nuevo. De ser hombres y mujeres nacidos de nuevo.

Este planteamiento tiene un profundo trasfondo espiritual porque se deriva de la necesidad de analizar nuestras vidas desde una perspectiva diferente y abandonar todo lo que creemos que es bueno.

Ese abandono nos llevará a una consecuencia que será absolutamente importante, porque entonces podremos comenzar a advertir como es de grande el Amor del Señor por nosotros.

Entonces sabremos que la frase de que lo bueno es enemigo de lo mejor es más trascendente de lo que nunca nos imaginamos, porque esa es la verdadera medida de Dios.

Seamos valientes y renunciemos a nuestro pasado y a nuestro presente, para tener un futuro maravilloso porque estará inspirado por el Amor del Dios Soberano que controla nuestras vidas.

Hechos 4:24
Diego Acosta García

CURIOSIDAD

De una manera más o menos despreocupada muchas veces buscamos en los medios de comunicación motivos para curiosear o simplemente por entretenernos.

Esa búsqueda puede resultar interesante y muchas veces puede derivar en cuestiones muy atractivas que verdaderamente llamen nuestra atención y nos centremos ellas.

De esta manera un día tras otro vamos incorporando esos motivos de atracción en algo que termina formando parte de nuestra vida, sin advertir los riesgos que estamos corriendo.toys3

¿Por qué razón que corremos riesgos con estas búsquedas? Por la poderosa razón que en la mayoría de los casos todo lo que nos resulta atractivo, no es bueno para nuestra vida.

Por eso debemos preocuparnos cuando advertimos que estamos viviendo una situación parecida, porque el hombre siempre tiene la errónea certeza de que es capaz de controlar determinadas situaciones.

Esto ocurre en muchos campos de nuestra vida y todos tenemos una experiencia más o menos próxima, para aceptar que esta afirmación tiene sólidos fundamentos.

Nunca confiemos en nuestra capacidad para abandonar determinados hábitos que fuimos creando dando libertad a nuestra curiosidad, creyendo que siempre estamos en control de la situación.

No seamos juguetes del enemigo que se complace ante personas que curiosean frívolamente y cambiemos drásticamente el sentido de nuestra vida. La Palabra de Dios debe ocupar el lugar de las atracciones peligrosas.

Proverbios 14:16
Diego Acosta García

CLAMOR

Cuando oramos establecemos una relación singular con Dios porque estamos reconociendo su Grandeza y porque nos declaramos hijos suyos en la armonía del Padre con su familia.

Ocurre que en algunas ocasiones nos encontramos con situaciones de tal gravedad, de tan profunda dificultad que cambiamos nuestra relación con el Eterno.

Avanzamos en la búsqueda de comunión y además de orar, levantamos un clamor para que nos escuche, para que preste oídos a nuestras necesidades, a aquellas cosas que nos están afligiendo.crying1

Con ese clamor estamos reconociendo su Soberanía sobre todas las cosas, sobre cada uno de los momentos de nuestras vidas y entonces y solo entonces estamos permitiendo que Él obre.

Es notable lo que ocurre cuando pasamos de la oración al clamor. Abandonamos nuestras posturas de soberbia, de vanidad, de poderlo todo, para pasar a la humildad del pedido profundo, sincero.

Es también el momento en el que nos abandonamos de verdad a la realidad  de la Soberanía del Señor y comenzamos a comprender que la Verdad de la Palabra se concreta en cada hecho que nos ocurre.

Por eso no tengamos ni miedo ni vergüenza por levantar un clamor al Dios de nuestra fe. No dudemos que Él cumplirá con su declaración y no nos abandonará nunca. Y muchísimo menos cuando clamemos por su ayuda.

2 Samuel 22:7
Diego Acosta García

FRIVOLIDAD

Puede que resulten muy atractivas las personas que supuestamente tienen notoriedad por su importancia o por las sus actitudes que tienen o por las relaciones que mantienen.

Tanta extravagancia sugiere fachadas relucientes, pero interiores que no deberían ser mostrados para que la pompa no sufra los estragos que la realidad suele ocasionaimages.jpg4r.

Incluso podemos llegar a pensar que hay personas que parecen estar al margen de las normas que rigen para todos los miembros de la sociedad, creando un halo de impunidad ofensivo.

Por eso resultan tan atractivas determinadas personas, porque se les supone la capacidad de vivir de una manera que para uno mismo sería motivo de sanciones legales o de escarnio público.

Si contrastamos estos casos con la medida espiritual con la que se nos mide, fácilmente comprobaremos que el atractivo queda reducido a una mezcla de pena y misericordia.

Pena por ver tantas vidas vacías, esclavas de su propia ansia o necesidad de notoriedad y misericordia, porque es la que debemos de tener por quienes viven sujetos a sus concuspicencias.

Jesús vino al mundo a salvar a los perdidos, no a los supuestamente justos o a quienes pareciera que no tienen necesidad ni de su perdón ni de su Salvación.

Mateo 10:33
Diego Acosta García  

HACER

Todos los creyentes hemos aprendido que la fe viene por el oír, una verdad fundamental que debemos atesorar para continuar creciendo espiritualmente y no ser niños todo el tiempo.

Oír es un requisito tan importante como su consecuencia: Obrar. Si nos quedamos solamente en el oír seremos siempre oidores pero nos faltará el complemento indispensable.

Ser hacedores de la Palabra es lo que confirma las obras de nuestra fe y es una cuestión absolutamente importante para que nos podamos mostrar como creyentes en acción.

Si Abraham solamente hubiera oído nunca obrar1hubiera terminado la obra extraordinaria que el Eterno había dispuesto para su vida, al abandonarlo todo y partir hacia donde se le mandaba.

Es así como debemos comportarnos. Oír la Palabra y luego ponerla por obra para que verdaderamente podamos servir a los propósitos que han sido establecidos para nuestras vidas.

No dudemos ni un momento en seguir oyendo la Palabra, para aprender más y para ser mejores maestros en el futuro. Pero tampoco dudemos ni un momento en ponerla en práctica.

Solamente así seremos hombres y mujeres que crecemos al impulso de lo que aprendemos oyendo y cumpliendo los mandatos que vamos aprendiendo.

Deuteronomio 30:8
Diego Acosta García

REQUISITOS

La fuente inagotable de Sabiduría que es la Palabra de Dios nos sigue mostrando su plena vigencia en el mundo en el que vivimos, donde las normas del “vive como quieras” cada vez están más vigentes.

Hace casi dos mil años fueron establecidos los requisitos que debían cumplir los obispos y pablo2los diáconos de la Iglesia, en la carta que Pablo le envió a su discípulo Timoteo.

Podríamos preguntarnos acerca de las razones que tendría el Apóstol de enfatizar en dar a conocer normas para personas que se supone deberían de tener méritos para ocupar sus cargos.

Esto nos debe hacer reflexionar acerca de la necesidad que tenemos los creyentes de tener presente que no bastan las cuestiones espirituales para ser ejemplares ante los hombres.

Seguramente por eso Pablo dictó unos requisitos que parecen sorprendentes porque deben ser aceptados y puestos en vigor por hombres que ocuparán lugares relevantes en el Cuerpo de Cristo.

Es evidente que esto tiene que ver con nuestra conducta personal, que desde lo espiritual debe trascender a lo que las personas del mundo pueden apreciar con nuestros hechos cotidianos.

Cumplamos las normas espirituales y también cumplamos con las normas que se nos han dado, para que cada uno de nuestros hechos sean portadores del mensaje de Salvación de Jesús.

1 Timoteo 3:1-13
Diego Acosta García

APRENDER

 

Hace un tiempo nos tocó vivir una difícil situación personal que estaba relacionada con nuestro servicio, que provocó una profunda decepción por lo inesperada y por las características que tuvo.

Fue la típica situación en la que generalmente además de amargarnos y de declarar que no entendemos nada de lo que está pasando, podíamos  responsabilizar a Dios de todo.

En otras palabras: la misma o parecida situación por la que lamentablemente muchas personas se han apartado de Dios, de su Iglesia, como si fueran responsables de lo que nos ocurre.esperar1

En esas circunstancias tan difíciles pudimos advertir la obra del Espíritu, dándonos la serenidad suficiente como para entender que lo que había sucedido era cosa de hombres.

Sin acusaciones, sin levantar juicios y sin arrepentirnos de haber servido y sobre todo, entendiendo que en todas las situaciones, tanto las buenas como las otras está la Voluntad Soberana del Eterno.

Fue así como pudimos dar gracias por lo que había sucedido sabiendo que detrás de todas las cosas está el Eterno y que no nos concierne aunque nos afecte, conocer cuáles son sus propósitos.

Debemos recordar en toda circunstancia, que el Único que puede transformar lo malo en bueno es el Eterno y por tanto todos nuestros actos deben estar confiadamente sujetos a su Voluntad.

Lamentaciones 3:25
Diego Acosta García

TÚNEL

Generalmente los túneles son utilizados para ejemplificar situaciones difíciles, en los que la salida se la ubica lejana, pero dejando siempre la certeza que al final existe.

Esta alegoría es completamente válida, pero a la que habría que agregar que los túneles siempre tienen una entrada y que a ella nos dirigimos de muy distintas maneras.

En muchas ocasiones somos nosotros mismos los que parece que no nos damos más alternativas que dirigirnos directamente a esa boctunnelsa oscura que son las entradas.

Con nuestros hechos, con nuestra incapacidad para escudriñar las situaciones complejas o también con nuestra falta de cordura para tomar decisiones correctas.

Recordar a la boca oscura de entrada, también nos debe hacer pensar que en otras ocasiones entramos en los túneles a consecuencia de las pruebas que debemos pasar para nuestro crecimiento espiritual.

Cuando pensemos entonces en estas vías de comunicación, recordemos que tienen un propósito que no es otro que facilitar el paso ante una dificultad importante.

Está en nosotros que los túneles tengan una entrada y una salida, que nos lleven de una determinada situación a otra mejor, tras haber podido superar un desafío geográfico que representa un desafío espiritual.

Apocalipsis 3:10
Diego Acosta García