EXAGERACIÓN…?

ANTIVIRUS

Vivimos en una época, en la que hay que evangelizar a los evangélicos! Esta frase habrá molestado a muchos hombres y mujeres que se llaman hijos de Dios.

Fue una de las tantas que pronunció el maestro David Wilkerson, que a lo largo de su vida aportó más definiciones severas que otros muchos hombres de la fe.

Esto de sentirse incómodo con algunas palabras fuertes, duras, nos debe llevar a un razonamiento personal, acerca de cómo está nuestra relación con el Eterno.

Generalmente en estas circunstancias se apela al enfriamiento del primer amor, pero es necesario ser más que sinceros, que en algunos casos no hubo ni siquiera ese amor.

Seguramente porque nos movemos por emociones, sentimientos y como se utiliza muy frecuentemente…por sensaciones, como si todo eso tuviera algo que ver con Jesús.

Abandonemos las sensaciones y busquemos la realidad, primero en nuestras vidas y luego como creyentes, como miembros de congregaciones que languidecen espiritualmente, aunque se diviertan y tengan cultos espectaculares.

Tenía mucha razón el maestro Wilkerson!

Diego Acosta

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DESORDEN

DEVOCIONAL

A veces los sencillos ejemplos son más ilustrativos que densos pensamientos.

Leí que una persona comparaba la llegada de Jesús, con una visita inesperada, cuando nuestra casa estaba desordenada, sin limpieza y además sin tener ganas de arreglar nada.

Seguramente ante esa visita trataríamos de disculparnos de todas las maneras y con los más variados argumentos. Esperando que el recién venido entendiera el fastidio y la vergüenza.

Pero con Jesús, como haríamos?

Servirían nuestras disculpas y nuestras razones?

Así de simple es la situación de nuestra vida. Cada día debemos estar preparados para la venida de Jesús!

Cada día!

Porque vendrá cuando no lo esperemos y tengamos todo en desorden, sin nada bueno que mostrar y con palabras vanas para justificar, lo injustificable.

Pensando en esto, he comenzado a arreglar mi casa, a limpiarla, a pagar mis cuentas y también a mostrar mis obras de fe. Sé que no habrá excusas y que a ÉL no lo puedo engañar.

1 Tesalonicenses 5:2
Porque vosotros sabéis perfectamente que
el día del Señor
vendrá así como ladrón en la noche.

1 Tessalonicenses 5:2
Porque vós mesmos sabeis muito bem que
o Dia do Senhor
virá como o ladrão de noite
.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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EL FIN

DEVOCIONAL

Generalmente cuando nos referimos al fin, siempre hay dos versiones. Una, la del fin del mundo, que es la que consideran las personas que viven alejadas o negando a Dios.

Y quienes en cambio, nos consideramos sus hijos, cuando hablamos del fin, hacemos referencia a lo que anunció Jesús: el fin de los tiempos. Advertir estas diferencias nos lleva a una cuestión sobre la que casi nunca hablamos.

En lo personal muchas veces me sorprendo, porque mis comportamientos son los de una persona que podría vivir cientos de años, sin reparar en el tremendo detalle que un día tendré mi propio fin.

Y el Hijo del Hombre, cuando nos advierte que debemos estar preparados para el fin de los tiempos, en forma directa nos está hablando a cada uno, para que pensemos que está implícito que debemos estar preparados para el fin de nuestra existencia.

Pensando en ese final, busco cada día ser mejor!

Marcos 13:33
ESMirad, velad y orad;
porque no sabéis cuándo será el tiempo.

PTOlhai, vigiai e orai,
porque não sabeis quando chegará o tempo.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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ORACIÓN-Por los que necesitan

Oremos por los que tienen vendas en los ojos!

Oremos por los que tienen engaño en su corazón!

Oremos por los que ansían liberarse y no pueden!

Oremos por los que buscan y no encuentran!

Oremos por los que  precisan ayuda y no la reciben!

Oremos por los que pudiendo dar no lo hacen!

Oremos por los que todavía deben recibir a Jesús!

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ENCONTRO…

Como posso te explicar o que aconteceu nos
» Encontros de Jovens», dos anos 60 em Goiânia?
Jovens, que se dedicavam em » BUSCAR A FACE DO SENHOR», ouvindo pregadores sérios, que pregavam a Palavra com poder, e momentos de oração que levavam ao reconhecimento do pecado proprio e consequente quebrantamiento que isto trazia?
Depois vieram os acampamentos, com momentos de » brincadeira» para agradar os jovens, como se os jovens fossem incapazes de levar a sério sua vida espiritual e necessitasse alguma distração para passar o tempo.
Que saudades daqueles Encontros com Deus!!
Será que um dia voltaremos a sentir saudades da Presença de Jesus, a ponto de deixarmos de lado nosso divertimento e passarmos 3 dias com Ele, sem outra meta, a não ser desfrutar de Sua gloriosa PRESENÇA?

Pensemos nisto!!!!

Pra. Arlete Batista Ferreira

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