LA PALABRA…

biblia

Es sorprendente como un solo vocablo puede tener tanto significado.

La Palabra…sintetiza nada más ni nada menos que la propia Biblia.

La Palabra, es la Palabra de Dios!

Cuando leo el Texto Sagrado, recuerdo como mis maestros me alentaban a hacerlo, pero de una manera muy especial.

Se trataba de encontrar un momento en el que tuviera sosiego, no solamente físico, sino también espiritual, para entonces sí beber de esta Fuente de Vida.

Soy plenamente consciente de que mis lecturas de la Biblia no se dieron en esas circunstancias, de sosiego, de paz interior.

Más bien, las lecturas fueron hechas…y son hechas, más con el signo de la necesidad y la prisa, que con la calma y la pausa.

Es importante recordar algo sobre lo que fui enseñado: El valor que tiene cada cosa que decimos, cada expresión que sale de nuestra boca tiene un poder que si lo apreciáramos en su justa medida, permaneceríamos en silencio la mayor parte del tiempo.

Desde los remotos tiempos de la escritura de los Salmos, los judíos le daban un valor notable a la palabra dicha, tanto en el sentido literal como en el de la alabanza a Jehová.

Cada vez que voy a decir algo, lentamente voy aprendiendo a callar. A tener plena conciencia de lo que voy a decir, porque puede ser de bendición o de maldición.

Una sola palabra puede destruir una vida, porque con una sola expresión, podemos sembrar la raíz de amargura en el corazón de una persona.

Hagamos como Jesús: Solamente hablemos lo que debamos hablar!

Todo lo demás, lo callemos!

Salmo 147:15

ÉL envía su palabra a la tierra;
Velozmente corre su palabra.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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