22 de Agosto de 1642 – LOS PRESBITERIANOS CIERRAN LOS TEATROS EN LONDRES
La Administración Puritana determina que los espectáculos eran indecorosos y los entretenimientos de ese tipo eran inaceptables.
La restricción fue ampliada cinco años después al comprobarse infracciones a la norma, por lo que se amenazó con encarcelar y castigar a quienes representaran obras teatrales.
Los castrigos fueron en aumento porque cualquier actor descubierto desarrollando su profesión podría ser azotado la primera vez, tratado como granuja incorregible la segunda. Las personas que sean descubiertas presenciando una obra teatral serán sancionadas con multas de cinco chelines.
Esta época fue designada como el reinado de Alabanza a Dios y se hizo evidente con nuevas regulaciones estrictas sobre el teatro, que aplicaba un preboste designado especialmente.
Diego Acosta
