Un grupo de trabajadores encontraron y destruyeron parte de valiosas antigüedades en una obra en la región costera de Ashkelon.
Incluso llegaron a utilizar un tractor con el que destruyeron importantes restos históricos, por el que los trabajadores serán juzgados por el delito de daños a un conjunto histórico de gran importancia.
En la ciudad antigua los trabajadores ocultaron a las autoridades el hallazgo de un sarcófago de unos 1.800 años de antigüedad.
Funcionarios de la Autoridad de Antigüedades de Israel, tomaron conocimiento del caso y paralizaron los trabajos de construcción.
El sarcófago es uno de los más raros descubiertos en Israel y podría aportar informaciones relacionados con el terremoto ocurrido en el año 363 en Galilea.
El sarcófago tiene dos metros y medio de largo y está esculpidos en todos los lados, con una figura pequeña tamaño natural tallada en su tapa.
Uno de los lados de la tapa tiene la imagen tallada de un hombre apoyado en su brazo izquierdo, vistiendo una camisa de manga corta adornada con bordados en el frente. Los ojos de la imagen seguramente estuvieron representados con joyas preciosas, que han desaparecido.
Por la naturaleza de las figuras encontradas en el sarcófago, se atribuye su construcción a la época romana en la que se protegía a los fallecidos con imágenes.
Próximamente se esperan más conclusiones sobre este singular descubrimiento arqueológico en la región costera de la ciudad de Ashkelon.
Diego Acosta