PARA PENSAR / 105

CS LEWIS
No creo que Dios quiera exactamente que seamos felices, quiere que seamos capaces de

amar y de ser amados, quiere que maduremos, y yo sugiero que precisamente porque Dios

nos ama nos concedió el don de sufrir; o por decirlo de otro modo: el dolor es el megáfono

que Dios utiliza para despertar a un mundo de sordos; porque somos como bloques de

piedra, a partir de los cuales el escultor poco a poco va formando la figura de un hombre,

los golpes de su cincel que tanto daño nos hacen también nos hacen más perfectos.

Clive Staples Lewis

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