Los seres endemoniados siempre respetaron la autoridad de Jesús, porque saben quién es Él y el Poder que tiene, aún sobre quienes se rebelan contra su autoridad.

Por esta razón debemos de tener presente que los seres endemoniados saben quiénes somos nosotros y por tanto saben la naturaleza del Poder que tenemos para combatirlos.

De allí la necesidad de que nuestra relación con el Señor sea de tal magnitud, como para que los demonios no nos puedan preguntar: Tú quién eres?

Esta es la verdadera cuestión relacionada con la lucha con el poder de las tinieblas y con el Poder que nos ha sido dado para librar la batalla en el Nombre sobre todo Nombre.

Jesús nos enseñó que debíamos aprender sobre Moisés, los Salmos y los Profetas, para que entonces podamos tener la verdadera autoridad que se deriva de ese conocimiento.

Las cuestiones espirituales solamente tienen respuestas espirituales y debemos ser plenamente conscientes que nuestra Autoridad, se deriva del Poder de Jesús.

La lucha contra los demonios es tan importante, que la debemos asumir según el mandato que nos concedió el Señor y entonces y solo entonces nunca se nos preguntará: Quién eres?

Hechos 19:15
Diego Acosta García