AGRADECER SIEMPRE…

 

DEVOCIONAL 

Sería bueno y fundamental, podríamos decir, el enseñar a nuestros hijos, a nuestros menores, que la palabra de agradecimiento, debe estar en nuestra boca y en nuestros sentimientos…siempre.

Es la mejor manera de acercarnos al Dios Todopoderoso y a la vez retribuir aunque sea mínimamente las cosas maravillosas que hace en nuestras vidas. Aún aquellas que nos duelen o que no entendemos.

Como su propia Palabra nos revela, ÉL convierte lo malo en bueno y lo incomprensible en finalmente grato y venturoso. Que estos milagros sean conocidos por nuestros hijos, para  que ellos a su vez los enseñen a su descendencia.

Enseñar sobre las Bondades de nuestro Dios, es una de las grandes tareas que tenemos cada día, para que fructifique en otros el mismo Amor que despertó en nosotros y nos convirtió en Hijos solamente por su Gracia.

En esto pensaba luego de vivir una vez más, otra milagrosa muestra de su Amor y Cuidado, de una manera que supera todo lo comprensible y solo puede entenderse desde la perspectiva de la fe.

Seamos agradecidos al Padre, que nos envió a su Hijo Unigénito, para que nos diera la Salvación y la Bendita Esperanza de la Vida Eterna.

Colosenses 3:15
Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos.
Diego Acosta /Neide Ferreira