COMPRENSIÓN


En su infinita Sabiduría el Eterno ha creado al hombre para que viva según un proceso que asombra por su perfección y conmueve por su diversidad.

Desde que nacemos precisamos los cuidados de nuestros padres, porque sin ellos no podríamos vivir. Cuando crecemos, aprendemos a valernos por nostros mismos.

El siguiente paso del proceso es el del estallido que significa la juventud. En ese tiempo nuestra energía es tan grande que somos capaces de realizar los trabajos más impensados.

Es el tiempo también en el que tenemos hijos y los ayudamos a crecer, siguiendo el camino emprendido por nuestros mayores. Nuestro vigor alcanza para el trabajo y… para servir en la congregación.

Pero que ocurre cuando las energías declinan? Dejamos de ser útiles? Jetro le enseñó a Moisés que debía buscar a hombres que fueron capaces de ayudarlo.

Por qué? Porque al declinar las fuerzas la Omniscencia del Eterno le concede a los hombres la capacidad de tener más Sabiduría y que es otra forma de servir.

Un anciano no podrá hacer lo que los jóvenes, pero si podrá hacer las tareas apropiadas, apoyando y generando ambientes propicios para la armonía y el crecimiento de la fe con la enzeñanza.

Cada uno de nosotros según su tiempo, debe servir al prójimo. El joven con energía, el anciano con Sabiduría!

Job 28:28
Diego Acosta García
Música. Neide Ferreira

www.septimomilenio.com

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