La inagotable Fuente de Sabiduría que es la Biblia, nos enseña acerca del cuidado que debemos de tener con quienes son repetidores de sus versículos, tergiversando su verdadero sentido.
Este es uno de los riesgos que se corre cuando sacamos los versículos de su contexto y entonces las personas se confunden y confunden a quienes los escuchan. De allí la importancia de buscar a los buenos maestros.
Cuando nos encontramos con personas como estas, que se confunden y confunden, también puede ser que además de cambiar el sentido del mensaje bíblico, también lo puedan estar manipulando.
Y es más grave todavía, cuando esa manipulación no es deliberada porque cada vez el fondo de la cuestión queda más alejado, llevando el nivel de confusión a auténticos problemas relacionados con la Verdad.
Jesús nos advirtió acerca de que nadie nos engañe y por tanto debemos estar alertas escudriñando todo lo que escuchamos y todo lo que se nos pretende presentar como la Verdad contenida en la Biblia.
Es evidente que también debemos obrar con Amor hacia las personas que se encuentran en esta situación, para ayudarlas a salir del laberinto en que se encuentran, mezclando cuestiones religiosas con las cosas de Dios.
La Sabiduría nos lleva a ser prudentes y a no hablar más de lo que debemos y sabemos, con el ánimo de no confundirnos nosotros mismos y no tergiversar el mensaje revelado en la Palabra de Dios!
Jeremías 7:19
Diego Acosta
Música: Neide Ferreira
