En las últimas horas los extremistas musulmanes han tomado control de la práctica totalidad de la ciudad de Palmira en Siria.
El Observatorio de los Derechos Humanos del país, ha confirmado que antes del control de los yihadistas, hubo un retiro masivo de las fuerzas del régimen de Assad.
Los terroristas controlan el norte de la ciudad y se apoderaron de la base aérea, la prisión y los edificios de los servicios de seguridad.
En el último combate registrado, cientos de defensores del régimen sirio murieron y muchos residentes huyeron a las ciudades de Homs y Damasco.
De acuerdo a las últimas informaciones los miembros del estado islámico se encuentran a poca distancia de las antiguas ruinas situadas en el suroeste de Palmira.
Precisamente estas ruinas son la gran preocupación de Occidente, por cuanto son Patrimonio de la Humanidad. Se trata de grandes columnas romanas y torres funerarias.
Como ocurre en estos casos, la huída de residentes agrava la situación de los campos donde son recibidos tanto en Líbano como en Irak.
Mientras tanto los combates continúan en la ciudad de Ramadi, al este de Bagdad, tratando de frenar el avance de los terroristas del estado islámico.
Las fuerzas gubernamentales y las milicias chiitas, tratan de evitar la caída de Ramida, que sería un grave golpe para el estado irakí.
Oremos por las minorías religiosas!
Diego Acosta
