AMBIGUO

Un predicador afirmaba con gran inspiración del Espíritu, que vivimos tiempos que si tuviéramos que definirlos, podríamos decir que serían los tiempos de lo ambiguo.

Para explicarse, quién hablaba desde el púlpito se refería a los conceptos morales, al respeto entre las personas, a la actitud frente a los mayores y en general al cumplimiento de los Mandamientos del Eterno.

Pensando en este mensaje llegamos a algunas conclusiones sorprendentes. Es verdad que lo ambiguo puede definirse con el color gris, que es producto de mezclar el negro con el blanco.

Y siguiendo con esta idea también podríamos decir que el gris tiene un gran parecido conceptual con lo tibio, que es exactamente lo que se menciona en el mensaje a la iglesia de Laodicea.

Si el gris define el carácter de las relaciones entre los hombres, la tibieza define el carácter de las relaciones de los hombres con el Eterno. Y tan mala es una cosa como la otra.

El Señor dio diversas señales a los discípulos sobre el fin de los tiempos. Y probablemente esta tendencia a vivir en lo gris y en la tibieza, defina como serán las conductas de los hombres.

Ambiguos y tibios.

No son estas las condiciones que debemos de tener los hijos de Dios en estos tiempos tan trascendentes que nos toca vivir!

2 Pedro 3:17
Diego Acosta
Música: Neide Ferreira

www.septimomilenio.com

Deja una respuesta