La confirmación fue hecha por arqueólogos de la Universidad israelí de Bal Ilán, al indicar que habían liberado de su enterramiento una puerta y una fortificación monumental que corresponde a la ciudad filistea de Gat.
Este conglomerado fue el mayor entre los siglos IX y X a.C. y está localizado en Tel Zalfit, que fue abandonado luego de 1948 por sus habitantes árabes.
Se encuentra en la llanura costera de Israel, en las denominadas Laderas de Judea, a mitad de camino entre Jerusalén y la ciudad portuaria de Ashkelón.
Gat fue una de las ciudades filisteas más importantes y se caracterizó por sus continuos enfrentamientos con los israelitas.
Su esplendor coincide con los reinados de David y de su hijo Salomón. Su tamaño era dos o tres veces mayor que el de Jerusalén, Beersheva o Meguido.
El descubrimiento se valoriza pues la puerta de la ciudad filistea, tiene una referencia bíblica, relacionada cuando David huyó de Saúl, el primer rey de Israel y se convirtió en siervo de Achich que era rey de Gat.
Diego Acosta