Es posible que todas las veces que hayamos precisado ayuda, hayamos terminado con una frustración. Las personas de quienes esperábamos algo simplemente ignoraron nuestro pedido.
Podríamos pensar que la gente es mala? Que no tiene sentimientos? O que quienes considerábamos que eran nuestros amigos, no lo eran?
Muchas preguntas con varias respuestas posibles. Lo cierto es que cuando precisamos una ayuda, generalmente la buscamos en donde no deberíamos.
El resultado es bastante lógico. A búsqueda equivocada respuesta fracasada. Es sorprendente como nos cuesta aprender esta lección.
Y que nos dice la Biblia sobre la ayuda? A quién se la debemos pedir? A Dios, sin duda.
Los que niegan a Dios simplemente se encuentran ante el fin de su búsqueda. Si niegan a Dios, como le van a pedir algo?
Pero los que creemos, por qué no le pedimos ayuda? Tal vez porque a pesar de declararlo, nuestra confianza no sea tan grande como para pensar que realmente nos pueda ayudar.
Cuando pensamos que estamos solos y que nadie nos puede dar la mano que estamos esperando, aunque sea el último recurso, nunca dejemos de pensar en Jesús.
Él vino al mundo a buscar a los que precisan ayuda. No vino a buscar a los todopoderosos, a los fuertes, ni a los triunfadores. Vino a buscar a hombres y mujeres como nosotros… a los necesitados!
Hebreos 13:6
Diego Acosta
Música: Neide Ferreira
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