RETOQUE A LA REALIDAD
La cuestión relacionada con los retoques a las fotografías de personas, ha tomado la dimensión de una auténtica denuncia.
Quizás lo más grave del tema sea la aceptación que buena parte de la sociedad, hace de esta práctica que en definitiva no es otra cosa que intentar cambiar la realidad.
Una mujer o un hombre, lucen de una manera que hace pensar en la perfección, aunque luego los veamos tal y como verdaderamente son.
Nadie es tan perfecto, ni tan bello ni tan admirable!
Entonces, si sabemos que nos están mintiendo con las imágenes, por qué las aceptamos?
La respuesta tal vez la tengamos en nuestro interior. Curiosamente algo que se relaciona con el aspecto exterior, debe ser resuelto en nuestra íntima concepción de la vida.
Si toleramos la mentira, no haremos otra cosa que mentirnos a nosotros mismos!
Nada hay más peligroso que pretender cambiar la realidad…mintiendo. Si lo que vemos no nos gusta, lo modificamos, lo retocamos.
Estas afirmaciones no encierran una crítica hacia quienes trabajan en esta actividad. Es en realidad un llamado de atención personal, para entender que cualquier forma de mentira, termina siendo…mentira.
Y un retoque de una fotografía, no es otra cosa que una mentira anunciada y supuestamente tolerada por la sociedad.
Si verdaderamente pretendiéramos llegar al fondo de la cuestión, deberíamos recordar una sola cuestión: Quién es el padre de la mentira?
Si nos respondemos con franqueza, tendremos una postura diferente a los retoques…o como sea su nombre técnico.
Ud. qué opina?
Diego Acosta
