LAS DIETAS Y LA MAYORDOMÍA
La cuestión de las dietas parece haberse circunscripto a meras formulaciones relacionadas con las modas y con las proximidades del verano, que es cuando solemos tener conciencia del estado estético de nuestro cuerpo.
Pero realmente es un tema menor?
Si lo analizamos desde la perspectiva de las extravagancias, con toda seguridad la respuesta es afirmativa.
Pero si lo valoramos en su justa medida, debemos de tener especial cuidado en valorar lo que significa el mandato de la Mayordomía.
Somos responsables de todo lo que hacemos, decimos, omitimos, cuidamos o descuidamos. Entre todo, está nuestro propio cuerpo.
Y más grave aún: Del cuerpo de nuestros hijos, especialmente si están en la decisiva etapa del crecimiento.
Un parlamento europeo asumió esta última cuestión con una gran seriedad, llamativa si pensamos que los legisladores, siempre tienen presente las próximas elecciones…
Aún así en Italia han presentado un proyecto que determina la responsabilidad de los padres con los niños de corta edad.
La preocupación está dirigida a que se satisfagan los nutrientes indispensables para el crecimiento sano y armonioso de los niños.
Si lo pensamos desde la perspectiva de nuestra condición de creyentes, la cuestión es de la máxima seriedad. El mandato de Dios es cuidar de nuestro cuerpo, porque somos el Templo del Espíritu.
Tenemos la obligación de cuidar nuestro cuerpo, no solo desde lo que concierne a nuestra vida espiritual, sino también a nuestra vida física.
Alimentarnos bien y ser ejemplo para nuestros niños, forma parte del Mandato del Creador. Como es obvio, no estamos frente a una opción, sino frente a una obligación de necesario cumplimiento.
Ud. qué opina?
Diego Acosta
