ACTUALIZAR A DIOS?
Quienes creemos en la proximidad del fin de los tiempos, fundamentamos esta certeza en la continua aparición de los falsos profetas.
Quiénes son?
Entre otros los que se atreven a argumentar que la Biblia debe ser actualizada, porque fue escrito para otros tiempos históricos y para otras circunstancias sociales.
Esta impresionante falta de temor y temblor, como enseñaba Pablo, nos debe llevar a reflexionar sobre los tiempos en que vivimos.
Lo grave de esta clase de afirmaciones, no es solamente su enunciado público, sino también que comienza a ser practicada, incluso en las propias iglesias.
Estas prédicas no son otra cosa que la soberbia necedad de pretender actualizar el Evangelio para que los jóvenes lo puedan comprender mejor.
Doble mentira!
Ni podemos actualizar el Evangelio ni es cierto que nuestros jóvenes no lo puedan entender, tal y como fue Inspirado.
En realidad se trata de cambiar el sentido de Mandato que tiene el Texto Sagrado!
Dios estableció para los hombres normas de vida, que son las que garantizan nuestra restauración y nuestra salvación!
Eso y no otra cosa significó la muerte de Jesús en la Cruz!
Pretender cambiar estos hechos tremendos de la Gracia del Eterno sobre los hombres, es toda una señal de la obra de los falsos profetas.
Ellos son los encargados de anunciar un supuesto Evangelio, menos categórico, más permisivo y más tolerante.
Así es como llamaremos a lo malo bueno y a lo bueno malo!
Sorprende que el atrevimiento de muchos hombres llegue al extremo, de pretender cambiar el sentido de la Biblia.
En primer lugar esto significaría ni más ni menos, que cambiar el Mensaje Inspirado por el Todopoderoso. Y además pretender cambiar lo Eterno por lo finito y pequeño, como somos los hombres.
Está llegando el tiempo en que más que nunca debemos llamar a las cosas por su verdadero nombre. La pretendida tolerancia hacia el pecado, no es otra cosa que la pretensión de desobedecer a Dios sin consecuencias.
En el Libro de Apocalipsis se nos advierte de lo que le puede llegar a ocurrir a quién añadiere o a quién quitare palabras del Libro Profético.
Pretender cambiar la Biblia, representa rebelarse contra Dios!
Diego Acosta