Desde siempre los hombres hemos buscado tener poder sobre todos los demás!
El poder ha seducido con sus atractivos a muchos personajes y a las sociedades de las que formaron parte.
También el poder ha destruido a quienes buscaron conseguirlo a cualquier precio.
La búsqueda del poder, no revela otra cosa que la propia pequeñez de los humanos.
Nos empeñamos en ignorar a Dios, negándole lo que es una Verdad absoluta: ÉL tiene el Poder y permite que otros lo tengan. Cuando quiere y con quién quiere!
La Biblia nos enseña a ser humildes, porque es el estado esencial del hombre, para que se nos confíen obras, que a otros envanecerían y los llevarían a su propia ruina.
Romanos 13:1-2
PT – Toda alma esteja sujeita às autoridades superiores; porque não há autoridade que não venha de Deus; e as autoridades que há foram ordenadas por Deus.
Por isso, quem resiste à autoridade resiste à ordenação de Deus; e os que resistem trarão sobre si mesmos a condenação.
ES – Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas.
De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos.
Diego Acosta / Neide Ferreira