Es un método tan utilizado como ineficaz, no hablar de determinados asuntos, porque pareciera que de esta manera dejaran de existir.
Infelizmente lo inmundo ha existido y existirá porque siempre habrá quién esté contaminado con aquello que no es de Dios.
Podríamos afirmar que lo inmundo es a lo limpio como las tinieblas con la Luz!
La cuestión de lo impuro está propiciada por las actitudes de las personas, porque determinadas situaciones ocurren porque estamos dando brechas para que el enemigo las aproveche.
No cabe ninguna duda que el tema del espíritu inmundo pertenece al mundo que se opone al propio Dios y por eso se rebeló contra su propio Hijo cuando desarrolló su ministerio terrenal.
Nada que sea impuro puede prevalecer sobre el Reino, que representa la pureza esencial del Eterno. Por tanto la lucha contra lo inmundo, la debemos dar mientras estemos donde el Señor nos ha encomendado que estemos.
Sabiendo que Jesús triunfó en la Cruz contra los designios del enemigo de la fe, debemos ser conscientes que lo primero que debemos hacer para luchar contra lo impuro, es tratar de mantener nuestra propia pureza.
Si somos moralmente puros, podremos luchar contra lo que es moralmente inmundo!
Nadie puede luchar contra lo inmundo, sino utiliza la Autoridad que nos ha concedido Cristo, para expulsar demonios. Por tanto es una lucha que hacemos en nombre de Él y no por nuestra mera condición humana.
Clamemos por la ayuda del Señor para luchar contra lo inmundo!
Marcos 1:23-26
Diego Acosta
Música: Neide Ferreira