La vida de Rut es una de las más atractivas referencias que contiene la Biblia, con relación a una cuestión fundamental: Dios no hace acepción de personas!
Noemí y sus dos hijos emigraron desde Israel hacia Moab a causa de las sequías que afectaban a los cultivos y que provocaban auténticas calamidades.
Los dos varones se casaron y luego murieron y fue entonces cuando Noemí, que también había perdido a su marido, decidió regresar a una ciudad que se convertiría en esencial al cumplirse las profecías: A Belén, la menospreciada ciudad de Belén.
Noemí pidió a sus dos nueras que regresaran a los suyos, pero sus decisiones fueron distintas. Las tres mujeres viudas se enfrentaban al futuro incierto como era el que vivían quienes estaban en esa condición.
Orfa, decidió regresar y Noemí alentó a Rut para que hiciera lo mismo que su cuñada. Pero ella declaró:
No me ruegues que te deje, y me aparte de ti; porque a dondequiera que tú fueres, iré yo, y dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios mi Dios.
Donde tú murieres, moriré yo, y allí seré sepultada; así me haga Jehová, y aun me añada, que sólo la muerte hará separación entre nosotras dos.
Rut fue a trabajar al campo de un pariente de Noemí, Booz, quién finalmente la tomó por esposa.
Así se consumó el Grandioso Plan de Jehová!
Booz y Noemí fueron los padres de un niño al que llamaron Obed, quién con el tiempo engendró a Isaí, que fue el padre del Rey más importante de la historia de Israel: David.
Así es como el Libro de Rut, nos revela como fue la genealogía del Rey David, de cuya casa nacería el Mesías, en la ciudad menospreciada, Belén.
Rut fue entonces, la abuela del Rey David!
Una moabita en la ascendencia de Jesús!
Diego Acosta