LA PERVERSA IDOLATRÍA

DEVOCIONAL 

Estamos severamente advertidos acerca de la idolatría. El Todopoderoso de Israel nos llama la atención sobre cualquier forma de idolatría y sobre todo de una que tiene que ver con la que nosotros mismos somos capaces de crear.

Es que resulta evidente que la seducción del mundo, nos inspira a que caigamos precisamente es esa peligrosa forma  de transgredir lo que Dios nos ha mandado. Y debemos recordar que la transgresión es una forma de rebeldía más grave de lo que imaginamos.

La idolatría es tan vieja como el hombre mismo, porque desde siempre nuestros mayores encontraron motivos para adorar o para dejarse seducir por la riqueza, el éxito e incluso por los fenómenos naturales espectaculares.

Y en nuestros tiempos tiempos caemos en los mismos errores, originados en la perfidia mundana que nos quita la paz y el gozo, que solamente encontramos con el Señor y nos entregamos a la idolatría para satisfacer nuestras ansias erradas y nuestras ambiciones ajenas a la Voluntad de Dios.

Seamos sabios y no caigamos en la idolatría porque las consecuencias pueden traer lo que no deseamos en nuestras vidas y lo que tememos con relación al futuro.

Ezequiel 23:49
Y sobre vosotras pondrán vuestras perversidades, y pagaréis los pecados de vuestra idolatría; y sabréis que yo soy Jehová el Señor.
Diego Acosta / Neide Ferreira