LÍMITES

Según pasan los años los errores comienzan a mostrar su mejor cara, que no es otra que la de advertirnos para no volver a repetirlos.

Es cierto que en el mundo se afirma que el hombre es el único ser que es capaz de tropezar dos veces con la misma piedra.

En el listado de quienes lo hicieron, podría incluirme, pero con varias repeticiones.

Lo importante es que desde esa perspectiva, he aprendido a que todo tiene un límite y cuando nos negamos a aceptarlo corremos el riesgo, de tropezar dos veces o más con el mismo problema.

Cuando debo poner límites a una situación?

Cuando para sostenerla, comienzo a desarrollar argumentos, que se sostienen solamente por la equivocada actitud de no asumir la realidad.

Hay cosas que puedo hacer, hay cosas que me permiten hacer, pero hay cosas que deseando ayudar me son negadas.

Perseverar en esta situación, es más que peligroso, porque tratando de buscar una solución, dejo de ver que cada día que pasa todo se complica y lo que es una cuestión de trabajo o de servicio, se transforma en un problema personal.

La sabiduría consiste en no llevar la situación a ningún extremo y pedir al Eterno que nos defina, hasta cuando debemos de seguir. Y ÉL siempre responde!

Proverbios 14:29

El que tarda en airarse es grande de entendimiento;
Mas el que es impaciente de espíritu enaltece la necedad.

Provérbios 14:29

O longânimo é grande em entendimento,

mas o de ânimo precipitado exalta a loucura.

Diego Acosta / Neide Ferreira