JESÚS nos dice:
El asalariado, y que no es el pastor, de quien
no son propias las ovejas,
ve venir al lobo y deja las ovejas y huye,
y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa.
Así que el asalariado huye, porque es
asalariado,
y no le importan las ovejas.
Juan 10:11-12