Una viñeta de una publicación periodística aludía al maltrato que se hace de los pobres en algunos países, donde la tragedia ha dejado a cientos de personas sin sus seres amados.
Esa viñeta actualiza la antigua cuestión del cuidado de los más débiles que ha planteado la Biblia desde siempre, para que en cada tiempo las sociedades sean cuidadosas con quienes más lo necesitan.
Cuidar a los débiles no solo se lo puede relacionar con la ayuda que se les puede ofrecer, sino también con las actitudes de dignidad que obligatoriamente les debemos brindar.
Por esta razón, entre otras, que la Palabra de Dios habla del Juicio que todos deberemos afrontar y entre las preguntas que deberemos responder habrá varias relacionadas con los pobres.
La grandeza del Amor del Eterno es tan inasumible por los seres humanos, que nos puede llamar la atención que se reclama cuidado no solo con los pobres, sino también con las viudas y los huérfanos.
No hagamos a menos esta cuestión sobre los débiles, porque el Señor no la hace a menos. Jesús reclamó constantemente sobre la necesidad de que observemos este mandato.
Si hasta en una viñeta supuestamente humorística desde la perspectiva política recuerda el tema, por qué no habríamos de recordarlo nosotros cada día de nuestra vida?
Proverbios 14:21
Diego Acosta García