Pregunta?
Si tenemos la certeza de que fuimos perdonados, por qué seguimos sufriendo las consecuencias de nuestro pecado?
Acaso haya argumentos notables para las respuestas. Es cierto que Dios odia el pecado y ama al pecador, pero no es menos cierto que la Obra del Eterno se completará en nosotros.
Si tenemos la certeza de que fuimos perdonados, luego de nuestro arrepentimiento, es importante que seamos plenamente conscientes de lo que hicimos.
Cuando se educa a los niños se les hace comprender el por qué de determinadas actitudes rigurosas hacia ellos, porque es la única forma de evitar que repitan los mismos errores.
Tal vez por ese mismo criterio es que sufrimos las consecuencias de nuestro pecado. Si junto con el perdón fuéramos librados de todo lo que conlleva, es probable que Dios sepa que rápidamente nos olvidaríamos de todo.
En esas circunstancias del olvido, nuestra naturaleza podríamos llevarnos nuevamente a obrar en contra de lo que ha sido establecido como lo mejor para cada uno de nosotros.
De ninguna manera podemos pensar que estamos frente a una actitud vengativa del Eterno por haber cometido un pecado. Todo lo contrario, estamos frente a un acto de Amor.
Por eso sufrimos las consecuencias de nuestro pecado, de nuestras malas obras. Para que recordemos a donde caímos y de donde fuimos rescatados por el Señor!
Deuteronomio 25:13-16
Diego Acosta
Música: Neide Ferreira