Un hombre de 26 años ha logrado conmocionar al país, tras asesinar a 10 personas, a las que antes les había preguntado si eran cristianas.
El método es tan sencillo como escalofriante: Las personas muertas en todos los casos respondieron afirmativamente, razón por la que recibían un balazo en la cabeza.
Chris Harper Merecer era hijo de padre caucásico y madre de origen afroamericano. Como otros tristes antecedentes, el hombre era retraído y prácticamente no tenía relaciones sociales. Su única compañía conocida era su madre.
Mercer se declaraba introvertido y se mostraba en contra de lo que llamaba la religión organizada. Los testigos coinciden en afirmar que se trataba de una persona muy poco sociable, que casi siempre iba vestido con pantalones y botas militares.
La tragedia de Umpqua Community College in Roseburg, Ore, en Oregón, sigue atrapando la atención en los Estados Unidos, donde se formulan preguntas de muy difícil respuestas.
El Presidente del país declaró que le gustaría pedir a los ciudadanos de su país, que pensaran como el gobierno podría cambiar las leyes, para salvar vidas y permitir que las personas puedan crecer sin riesgos.
Tal vez debamos preguntarnos: Qué nos está pasando?
Diego Acosta
Fuente: New York Times – Estados Unidos