Más de cien especialistas en todo el mundo han manifestado su preocupación por el continuo aumento de los costos de los medicamentos para combatir el cáncer.
En un documento aseguran los elevados precios ponen en riesgo el acceso a los fármacos por los pacientes y son una amenaza real para la viabilidad de los sistemas de salud.
Los especialistas han promovido una amplia discusión sobre el tema, que comprende a todos los sectores afectados, pero obviamente a los pacientes y a la administración de salud de los países.
Las gastos se han duplicado en el término de 10 años, según una encuesta de precios realizada en los Estados Unidos, donde se ha pasado de alrededor de 3.800 euros mensuales por paciente a 7.600 mensuales.
Los especialistas revelan que los medicamentos cada vez son más eficaces, pero puede darse la paradoja que como sigan subiendo nadie los podrá pagar para usarlos.
El laboratorio Novartis revolucionó la medicina con un medicamento contra la leucemia, pero desde que apareció en 2001 aumentó de los 23 mil euros iniciales hasta los 69 mil de la actualidad.
La patente de este medicamento vence dentro de tres años y entonces su precio será del 10 por ciento de su valor actual, lo que pone en evidencia el brutal aumento de su valor.
Otro laboratorio, Roche está endureciendo el suministro de sus productos anticancerígenos a los hospitales que tienen mayor morosidad en el pago de sus envíos.
Este documento fue publicado por especialistas del “primer mundo”. Y cabe preguntarse: Como es la situación en los países del llamado “tercer mundo” y cuáles son los precios que se pagan por los mismos productos?
En la India comenzará la producción de genéricos para la lucha contra el cáncer, reduciendo su valor al diez por ciento, lo que permitirá asegurar su acceso a miles de pacientes.
Se argumenta la necesidad de que los laboratorios tengan ingresos suficientes como para investigar. Con sus actuales niveles de ganancia, esa necesidad no está asegurada con amplitud?
Llama poderosamente la atención que no se haya comentado ni una sola palabra acerca de la situación en el “tercer mundo” que también afecta a seres humanos como ocurre según el informe a los países más desarrollados de la tierra.
También llama poderosamente la atención el ominoso silencio de quienes se dicen defensores de los derechos de las personas. Es evidente que callan ante los poderosos y no son capaces de hablar en defensa de los débiles. Hasta cuándo?
Recordamos lo escrito en el primer Libro de Samuel, capítulo 2 versículo 4:
Los arcos de los fuertes fueron quebrados.
Y los débiles se ciñeron de poder.
Diego Acosta García