La más joven de los ministros del Gobierno alemán formuló unas declaraciones a un semanario, provocando una intensa cadena de reacciones.
Kristina Schoröder, dijo que le resultaba particularmente difícil hablar de Dios en masculino con su hija, analizando que del conocimiento del idioma se deduce que el neutro sería igual de bueno para referirse a Dios.
En Baviera de Familia, replicó diciendo que estaba estupefacto ante tal estupidez, argumentando que es triste dudar ante nuestros hijos sobre el nombre de Dios.
Otro dirigente de la misma región declaró: Para nosotros los cristianos, Dios sin duda es el Padre y debe seguir siéndolo. La polémica ocupa importantes espacios en algunos periódicos de gran circulación.
La ministra de Familia, la Mujer y los Ancianos, de 35 años, es criticada frecuentemente por las feministas por sus posturas conservadoras y su proximidad con organizaciones fundamentalistas.
Esta circunstancia sorprende todavía más con relación a las declaraciones poniendo en duda si se debía referir a Dios como masculino o en género neutro.
Esta clase de polémicas no ayudan para consolidar la creencia de quienes desde las dudas personales, no alcanzan a comprender ni la Grandeza ni la condición de Padre de Dios.
Fuentes: Die Zeit – Alemania
Press SM – Diego Acosta García – Corresponsal en Berlín