Los familiares consideran que es inminente la ejecución de Ali Al-Nimr de 20 años, condenado por haber participado en manifestaciones en el este del país.
La condena es extremadamente rigurosa porque los crímenes que se le imputan se consideran muy graves y por ello será decapitado a sable y luego sus restos serán exhibidos crucificados hasta su descomposición.
En Arabia Saudita las ejecuciones no son anunciadas, sino que son comunicadas a las familias luego de haber sido consumadas.
Hasta junio de este año se habrían ejecutado al menos 2.208 personas y lo que transcurre de este año se habrían cumplido 134 sentencias de muerte.
La cifra de este año es un record en los anales de la justicia saudí.
El joven que se cree será ejecutado de forma inminente es considerado un como un opositor al reino, que ha sufrido en los últimos meses una ola de atentados mortales contra la minoría chiita en el este del país.
Los atentados fueron perpetrados por la organización sunita conocida como estado islámico.
El joven Ali Al-Nimr fue detenido cuando tenía 17 años en febrero de 2012, por su participación en manifestaciones contra la familia real Saudí, en el marco de la llamada primavera árabe.
Diego Acosta:
Fuente: Le Monde – Francia
