INCRÉDULOS

DEVOCIONAL

Si Dios Manda, Obedecer. Si Dios Promete, Cumplirá.

Estas cuestiones que pueden resultar o muy sencillas o incomprensibles, son fundamentales en la vida de los que nos llamamos hijos de Dios.

La Biblia nos revela como Eliseo durante un tiempo de mucha hambre en la tierra mandó que se preparara una comida para los hijos de los profetas, que finalmente resultó mala, hasta que el profeta le agregó harina y pudieron saciar su necesidad.

Más tarde vino un hombre de Baar-salisa con veinte panes de cebada y trigo nuevo. La incredulidad del sirviente quedó de manifiesto con su pregunta: como pondré esto delante de cien hombres?

El hombre le respondió: Da a la gente para que coman y comerán y sobrará. Y se cumplió su palabra!

Cuántas veces dudamos de las promesas de Dios? Cuántas veces…cuántas veces!

Confieso que me abochorno de solo pensarlo. Poner en duda la Palabra del Eterno, es poner en duda el fundamento de todo lo que vemos y no vemos que ha sido Creado.

2 Reyes 4:44
Entonces lo puso delante de ellos,
y comieron, y les sobró,
conforme a la palabra de Jehová.

2 Reis 4:44
 Então, lhos pôs diante,
e comeram, e deixaram sobejos,
conforme a palavra do Senhor.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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ESTÁ TODO BIEN

DEVOCIONAL

La mujer sunamita que había sido madre según el anuncio del profeta Eliseo, al morir su hijo tuvo una reacción impresionante y aleccionadora.

Cuando el acompañante de Eliseo le preguntó como estaba, ella sencillamente contestó: Está todo bien y buscó hablar con el profeta.

Creo que es evidente el dolor de la mujer por la pérdida de su único descendiente, pero a la vez revela su convencimiento de que todo está bajo el control de Dios.

Todo lo que es bueno para cada uno de nosotros y lo que no lo es. Así de terminante fue la postura de la sunamita y así debe ser la de todos quienes nos llamamos hijos de Dios.

Obrando de esta manera, dejaría de quejarme, dejaría de mirar lo que hace mi prójimo y buscaría cumplir con aquello que el Eterno ha puesto en mi mano.

Está todo bien…significa que acepto todas las decisiones del Señor. Todas!

Sin discusiones, con aflicciones tal vez pero sin rebeldía, entendiendo que los propósitos del Altísimo son de paz y no de mal, como se lo reveló al profeta Jeremías.

Está todo bien…porque es lo que Dios ha dispuesto!

Él obrará con Amor y Misericordia, como obró con la mujer sunamita, usando a Eliseo para resucitar su hijo!

2 Reyes 4:26

Te ruego que vayas ahora corriendo a recibirla, y le digas:

¿Te va bien a ti? ¿Le va bien a tu marido, y a tu hijo?

Y ella dijo: Bien.

1 Reis 4:26

Agora, pois, corre-lhe ao encontro e dize-lhe:

Vai bem contigo? Vai bem com teu marido? Vai bem com teu filho?

E ela disse: Vai bem.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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JEROBOAM – JEROBOÃO

La Biblia nos recuerda una y otra vez que los errores de los humanos, tienen casi siempre un mismo origen y resultados parecidos.

Nos rebelamos contra Dios y luego sufrimos las consecuencias!

Hay una constante acción y reacción que tiene un profundo valor desde la perspectiva espiritual, para los creyentes del pasado y para los del futuro.

Jeroboam tuvo un comportamiento impropio y no solamente eso, sino que trató de engañar a un profeta del  Eterno.

Como era previsible las malas acciones y el intento de burlarse de un siervo de Jehová, trajeron la tragedia para el rey. Perdió su poder, su familia y la Memoria lo recordará como un ejemplo de lo malo.

No es posible acomodar los mandatos a nuestros intereses. Siempre será prioritario cumplir lo establecido por Supremo!

1 Reis 14:9-10

Antes, tu fizeste o mal, pior do que todos os que foram antes de ti, e foste, e fizeste outros deuses e imagens de fundição, para provocar-me à ira, e me lançaste para trás das tuas costas,

portanto, eis que trarei mal sobre a casa de Jeroboão, e separarei de Jeroboão todo homem até ao menino, tanto o escravo como o livre em Israel, e lançarei fora os descendentes da casa de Jeroboão, como se lança fora o esterco, até que de todo se acabe.

1 Reyes 14:9-10

Sino que hiciste lo malo sobre todos los que han sido antes de ti, pues fuiste y te hiciste dioses ajenos e imágenes de fundición para enojarme, y a mí me echaste tras tus espaldas;

por tanto, he aquí que yo traigo mal sobre la casa de Jeroboam, y destruiré de Jeroboam todo varón, así el siervo como el libre en Israel; y barreré la posteridad de la casa de Jeroboam como se barre el estiércol, hasta que sea acabada.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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