Hace algunas horas uno de los futbolistas más famosos del mundo sufrió una lesión que es propia de su profesión. Obviamente que el hecho tuvo la consabida repercusión.
Sin embargo lo más notable fue el mensaje que le envió una de sus hermanas. Un mensaje contenido en una de las redes sociales, por lo que estaba ceñido en su extensión a un número de palabras.
Por esta razón hay dos elementos a tener en cuenta: Que tanto quién lo envió como quién lo recibió, en este caso el futbolista, sabían perfectamente de que estaban hablando.
Ese mensaje no era otra cosa que una profecía que había sido hecho pública por uno de los miembros de la congregación de la Iglesia de Santos, donde evidentemente ambos congregaban.
En ese momento de incertidumbre, como es una aparatosa lesión en un futbolista, su hermana no dudó ni un momento en enviarle la única expresión de solidaridad posible: Un mensaje de esperanza!
La hermana y el propio Neymar no ocultaron sus creencias, en medio de un mundo tan dado al exitismo como es el deporte profesional. Resulta reconfortante, además de un ejemplo, este hecho ocurrido en las últimas horas.
El futbolista hizo declaraciones una vez conocido el alcance de su lesión: ¡Qué susto! En ese momento pensé que podía ser una lesión grave, pensé en mis planes para 2014… Pero Jesús, de nuevo, estaba conmigo y era sólo un susto… Quería dar las gracias a todos los que oraron por mí!
Dios guarda a los suyos, aún en las situaciones más difíciles!
Nunca lo olvidemos y nunca tengamos vergüenza de nuestra fe en Jesús!
Diego Acosta
