IMPROVISAR…?

Siempre he pensado que improvisar es un auténtico don.

Siempre he creído que la improvisación es un atributo que permite realizar determinadas tareas, para los que resulta casi de imprescindible necesidad.

También durante mucho tiempo pensé que improvisar era un atributo que se podía emplear en todos los órdenes de la vida.

Estas eran mis convicciones hasta que el Señor se convirtió en lo más importante de mi existencia.

Entonces comprendí lo gravemente equivocado que había estado a lo largo de muchos años y las consecuencias que ese error había provocado.

Una cosa es improvisar en momentos determinados y otra muy diferente es improvisar como norma de vida.

Lo aprendí con los duros golpes que recibí durante largos años y con la enseñanza del Libro de Génesis, cuando Dios creó al mundo.

Lo hizo con orden y sin improvisaciones!

Génesis 2:2

 Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo;

y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo.

Gênesis 2:2

E, havendo Deus acabado no dia sétimo a sua obra, que tinha feito,

descansou no sétimo dia de toda a sua obra, que tinha feito.

Diego Acosta / Neide Ferreira