LA LUZ DEL MUNDO…!

 

Candle and Opened Old Bible

 

LA LUZ DEL MUNDO…!

Hace más de 1.900 años Jesús enseñó acerca del fin de los tiempos y formuló advertencias, que muchos creyeron se cumplirían a lo largo de sus vidas.

No fue así y nos toca a quienes vivimos en esta época, quizás la posibilidad de ser los grandes testigos y protagonistas de esos acontecimientos extraordinarios que culminarán con el Segundo Advenimiento.

Pero, debemos de tener la certeza de que todo cuanto hagamos y todo cuanto digamos cuenta y mucho para el establecimiento del Reino.

Ha llegado la hora de hacer cierto nuestro Pacto con el Señor!

La oscuridad está dominando al mundo y cada vez es más necesaria que se mantenga encendida la LUZ de la esperanza y de la fe.

Ciertamente está llegando la hora en la que no habrá lugar ni para los tibios ni para los oportunistas. Cada día nos acercamos al final y solamente quienes seamos fieles seremos partícipes del Glorioso Advenimiento.

Y que debemos hacer?

Tal vez una sola cosa: Alimentar con nuestro testimonio y nuestra confianza la Lámpara que será una referencia de LUZ para el mundo.

Puede parecer poca cosa, porque alimentar con el aceite de la fe una lámpara, no resulta del todo atractivo para quienes por una cuestión de mera vanidad personal, se imaginan participando en grandes acontecimientos.

Pero si nos detenemos a pensar lo que significa mantener encendida la Lámpara de la Luz, comprenderemos el notable significado de esta tarea que nos encomendó el Señor.

Si la oscuridad predomina en el mundo, si las tinieblas van controlando a cada hora la forma de vivir de millones y millones de personas, como no resultará importante mantener viva una referencia de esperanza.

Hagamos buen uso del aceite que tenemos como fruto de nuestra fe, para alimentar esa pequeña Luz que quizás ilumine a lo lejos y pueda llegar a ser una Guía para quienes viven en la desesperación.

Cada uno debe cumplir con el mandato de ser Luz y la forma de cumplirlo, es no dejar que por negligencia o por temor, que esa llama pueda apagarse.

Esto nos será demandado!

Debemos ser el aceite que alimenta la Luz del Mundo!

La hora ha llegado. El Tiempo ha llegado. El Reino está próximo!

Diego Acosta

www.septimomilenio.com