Los hechos parecen negar las afirmaciones del Presidente de la Confederación Suiza, con motivo del Día del Holocausto, recordado recientemente.
Ueli Maurer dijo en su mensaje que: Suiza había sido durante la Segunda Guerra Mundial un refugio seguro durante este período oscuro para el continente europeo.
El historiador suizo Hans-Ulrich Jost, desmintió al Presidente al afirmar que Ueli Maurer era un manipulador de la historia y forma parte de los que tratan de ocultar la verdad.
Los fundamentos de la refutación son unos documentos que prueban que en 1942 el gobierno suizo era consciente del exterminio de los judíos, cuando decidió cerrar sus fronteras.
Los documentos de la llamada Comisión Bergier están ahora disponibles en Internet y ofrecen en más de 10 mil páginas la actitud de Suiza durante la Segunda Guerra Mundial.
Especialmente destacables donde se ven fotos en un documento identificado como “Secreto Geheim”, donde se pueden ver a cadáveres de judíos amontonados en vagones de carga donde se ahogaron.
Estos documentos fueron enviados por el cónsul de Suiza en Colonia al jefe de los servicios de inteligencia del Ejército suizo. Franz von Rudolf Weiss, acompañó las fotos con documentos manuscritos.
Pero el 4 de agosto de 1942 el gobierno suizo decidió cerrar las fronteras del país a los refugiados, incluso si se encontraran en peligro. El Parlamento respaldó al gobierno pero la población rechazó la decisión.
El “Informe Bergier” encargado por las autoridades tras el escándalo de los fondos judíos en cuentas inactivas en los bancos judíos, había incluido un comentario que el gobierno y parte de la industria suiza había ido demasiado lejos en su cooperación con el régimen nazi.
Según este informe alrededor de 24 mil refugiados en su mayoría judíos, fueron deportados durante la guerra. Un historiador indica que la cifra probablemente es mayor debido a que muchos registros fueron destruidos durante la guerra.
La dramática situación de los judíos en Europa durante la ocupación nazi, parece tener un nuevo capítulo con estas afirmaciones que llaman a la reflexión.
Fuentes: Le Monde – Francia
Press SM – Diego Acosta García