El Libro de Job tiene pasajes que son tremendos por su trascendencia y conmovedores por su significado. Es un Libro que muchos leen con aprehensión y muy pocos con comprensión.
Eliú reflexiona sobre Jehová y formula varios juicios, algunos acertados y otros equivocados como cuando dice que Job había pretendido una perfección sin pecado.
Job se había arrepentido de sus pecados y Eliú no lo sabía, pero declara que Dios nunca será injusto porque es demasiado santo para serlo. Por lo tanto era justo con los hombres.
Con ese argumento Eliú dice que el Eterno es poderoso, recto, imparcial, omnisciente, Soberano sobre todas las cosas y ejerce su Voluntad para no permitir el mal.
Podemos reflexionar a propósito de estos pensamientos y remarcar que el Eterno es el quién ejerce su Autoridad sobre toda la Creación y la preserva del mal de los hombres.
No admite el pecado pero ama a los pecadores arrepentidos en búsqueda de su perdón. Estas Verdades están dirigidas por Eliú a Job y a quienes le hablan duramente.
Seguramente más de una vez afrontamos o volveremos a afrontar juicios desmesurados, injustos. Pero debemos pensar que el Juicio verdadero será el de nuestro Dios. Él es el aliento de nuestra vida!
Job 34:14
Diego Acosta García