BENDICIÓN

david-1
En el Libro 1 de Crónicas, hay un agradecimiento singular de David a Jehová por las promesas que le hizo con relación a él, a su casa y para el futuro. Este agradecimiento tiene una especial enseñanza.

Los que somos generaciones posteriores al rey de Israel, debemos considerar la importancia que tiene nuestra relación con el Eterno y también lo que hagamos como sus servidores.

La necesidad de dar frutos es también destacada en el Antiguo Testamento, por cuanto el profeta Natán habló a David para transmitirle lo que Jehová había dispuesto con relación a él y su descendencia.

En lo estrictamente personal, cada uno de nosotros debe advertir que las promesas del Eterno son irrevocables, que están cumplidas desde antes que las podamos ver.


Así fue con el rey de Israel, a quién el Supremo le prometió que de su casa nacería el Hijo del Hombre y pasaron muchos años hasta que todo se cumplió. Es verdad que pasó el tiempo y todos sabemos de la Grandiosa Verdad que se cumplió.

En la hora de la incertidumbre recordemos las promesas que Dios ha hecho para nuestras vidas, para ponerlas por delante de cualquier situación y para que tengamos la plena certeza de su cumplimiento.

Si miramos el pasado para aprender, viviremos con más seguridad el futuro.

1 Crónicas 17:12-14

Diego Acosta

Musica: Neide Ferreira

www.septimomilenio.com

Deja una respuesta