Jesús nos confronta ante la decisión
de oír su Mensaje o de no aceptarlo,
en cuyo caso caemos en la rebeldía.
Los fariseos y los escribas
fueron llamados hipócritas por Jesús
porque se negaron a escuchar sus Palabras
y establecían normas que ellos mismos no cumplían.
Diego Acosta – MENSAJE DOMINICAL
CONGREGACIÓN SÉPTIMO MILENIO