ANTIVIRUS
Con una espectacular presentación se formuló el anuncio de un…humanoide. Se lo destaca como uno de los grandes logros de la tecnología.
Pensando en todas las propiedades que tiene el ingenio, podemos llegar a la conclusión que puede ser un eficaz ayuda para las tareas de los hombres.
Sin embargo, profundizando en la cuestión nos preguntamos: Para que desea la especie humana tener un sucedáneo de sí misma?
Las respuestas son difíciles de encontrar. Se puede argumentar que la pregunta tergiversa el sentido de esta fabricación, pero entonces llegamos a otra pregunta:
Necesitamos un robot humanoide?
No tenemos ninguna duda que todo lo que ocurre es porque el Eterno lo permite, aún teniendo en cuenta que muchas veces en su Sabiduría nos permite hacer cosas que son un producto de nuestra obcecación o necedad.
Resulta claro que frente a este humanoide, nuestra actitud debe ser rigurosa en cuanto a las expectativas y también amplia en cuanto al futuro de sus aplicaciones.
Distinto sería que hablemos de un robot que sea capaz de hacer intervenciones quirúrgicas a distancia, dirigido por cirujanos especialistas, por ejemplo.
Diego Acosta