ANTIVIRUS
Se recuerda el Día contra la Trata de Personas, una de las más atroces y miserables actividades mafiosas, que operan en todo el mundo.
Infelizmente no hay nada que señalar como un éxito contra esta obra de brutales características, que tiene como víctimas como casi siempre, a los más débiles e indefensos.
Los amplios campos de negocio de las mafias que tratan con personas son tan grandes, que su explotación pareciera que crece sin límites.
A ello se suma la cómplice omisión de las autoridades, que no profundizan en los esfuerzos para controlar esta obra de maldad contra hombres, mujeres y niños, todos de la más humilde condición.
Levantar la voz contra la trata de personas, no es otra cosa que repetir las Palabras del Eterno, que fijó como un Mandato cuidar de los débiles y los extranjeros.
Otra cuestión que un día nos será reclamada.
Diego Acosta