LA OTRA HISTORIA – XIII

la otra

AARÓN, BOCA DE MOISÉS

La vida del hermano mayor de Moisés es una de las más singulares de las que registra la Palabra de Dios.

Fue el propio Jehová quién le dijo al gran hombre de la historia de Israel, que su hermano sería su boca, Éxodo, 4:16.

Fue precisamente la condición de tener difícil palabra la que esgrimió Moisés para que fuera otro quién cumpliera el plan de Liberación de los israelíes de Egipto.

El hermano mayor era un hombre de fácil palabra y así se cumplió el propósito del Supremo, sobre las debilidades físicas que sus elegidos tenían.

Así fue como Aarón fue la boca de su hermano, hasta que se produjo la salida de Egipto y el grandioso momento del milagro del cruce del Mar Rojo, en el que Moisés directamente habló al pueblo, Éxodo 14:13.

Aarón que tuvo que asumir el liderazgo de los liberados de Egipto, sin embargo no tuvo las condiciones que distinguen a los líderes y permitió que mientras Moisés estaba en el Monte Sinaí delante de Dios, fuera construido el becerro de oro, Éxodo 32:22-25.

Aarón recibió de parte de Jehová la condición de sumo Sacerdote, Éxodo 28:1, Levítico 8:2, asumiendo la representación de Israel ante Dios.

Aarón fue quién podía entrar en el Día de la Expiación al Lugar Santísimo, como único representante de Israel, Levítico 16:13.

Aarón participó de la rebelión contra su hermano y por su falta de fe, no pudo entrar en la Tierra Prometida. Fue sucedido como sumo Sacerdote por su hijo Eleazar.

A su muerte, hubo duelo en Israel por 30 días. Algo excepcional porque normalmente el luto se extendía por una semana.

La vida de Aarón nos debe enseñar que los Propósitos del Supremo son inescrutables y que no existe mente humana que pueda descifrarlos.

Diego Acosta

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