DEVOCIONAL
Cuando escuchamos decir que la historiase repite, estamos ante una de las grandes verdades que rodean la vida de los humanos.
Jehová reprochó al pueblo de Israel por haberse rebelado contra su Autoridad y lo mismo nos puede decir en estos días, como una prueba concluyente que el corazón de los hombres es el que alberga la maldad.
Por qué oscuras razones obramos de esta manera?
No es casual a pregunta, porque la actitud humana parece regida por las tinieblas y por el diablo que las habita y las rige. Y su influencia parece extenderse cada día más.
De allí la necesidad de buscar la Luz, como las que en un túnel nos permite adivinar donde está la salida. Como es natural me incluyo en los malos comportamientos.
Solo la Grandeza del Eterno nos libra de ser fulminados por tanta rebeldía sin sentido y por tanta soberbia vana. Solo cabe pedir perdón y apelar a la Misericordia del Poderoso para volver a llamarnos sus hijos.
Jeremías 2:31
ES – !Oh generación! atended vosotros a la palabra de Jehová.
¿He sido yo un desierto para Israel, o tierra de tinieblas?
¿Por qué ha dicho mi pueblo:
Somos libres; nunca más vendremos a ti?
PT – Ó geração! Considerai vós a palavra do Senhor.
Porventura, tenho eu sido para Israel um deserto?
Ou uma terra da mais espessa escuridão?
Por que, pois, diz o meu povo:
Desligamo-nos de ti; nunca mais a ti viremos?
Diego Acosta / Neide Fereira