MAGNICIDIO

ANTIVIRUS

El asesinato del John Kennedy, ocupa todos los años un lugar preponderante en la actualidad mundial.

Y resulta lógico que sea así, por cuanto su muerte fue un magnicidio de enorme trascendencia. Obviamente, se trataba del asesinato del presidente de los Estados Unidos.

Queremos reflexionar sobre este hecho y otros hechos que permanecen ignorados o que quedan perdidos en el vertiginoso mundo en el que vivimos.

Son las muertes de los inocentes que mueren de hambre, de sed, por problemas que podrían ser resueltos fácilmente y que sin embargo, nadie trata de resolverlos.

El asesinato de Kennedy, nos lleva a recordar otras muertes, cotidianas, dolorosas por su soledad y angustiosas porque se repetirán casi sin remedio.

Cada vez que recordemos un magnicidio como en el que nos ocupa, recordemos a quienes mueren ignorados, por ser simplemente un número para una sociedad fría, calculadora, que solo se conmueve circunstancialmente.

Hacemos memoria de los muertos inocentes! Y oramos por sus familias, que no tienen más consuelo que el de llorar en la más absoluta soledad.

Diego Acosta