Por considerarlo de especial importancia para la salud de las personas, incluimos este comentario.
Científicos británicos descubrieron que se puede perder peso sin hacer dieta, sólo hace falta reducir la cantidad de alimentos ricos en grasa, y sustituirlos por otros menos grasos. Así asegura un artículo publicado en el British Medical Journal por investigadores de la Universidad de East Anglia, que encontraron que las personas que cambiaron alimentos grasos por sustitutos con bajo más contenido de grasa perdieron cerca de 1,6 kilos en seis meses sin hacer dieta. También descubrieron que reducir la grasa en la dieta proporciona ventajas adicionales para la salud, como la reducción de la presión arterial y los niveles de colesterol malo.
Para actualizar sus recomendaciones sobre el consumo total de grasas, la Oganización Mundial de la Salud encargó recientemente un estudio para evaluar la relación entre la grasa corporal y los productos grasos consumidos en la dieta diaria, a través de varios indicadores de grasa corporal como el peso total, el tamaño de la cintura y el índice de masa corporal (BMI). Para este estudio, los investigadores evaluaron 33 ensayos en Norteamérica, Europa y Nueva Zelanda, que incluyeron a 73 589 participantes de diversas edades y estados de salud.
Los investigadores compararon las medidas de cintura y el peso de los participantes que consumían una dieta baja en grasa con aquellos cuya dieta incluía las cantidades habituales de grasa durante al menos seis meses. Además de perder 1,6 kg de peso corporal, también encontraron que los participantes redujeron el total de su índice de masa corporal por 0.56kg / m² (kilos por metro cuadrado) y redujeron el perímetro de su cintura en 0,5 cm.
Los científicos aclararon que ambos grupos se les dio el mismo tiempo y atención a ambos grupos, la reducción de peso no desapareció lo que sugiere que la pérdida de peso fue realmente debido a la menor ingesta de grasa.
“El efecto no es dramático, como en una dieta. El estudio buscó específicamente a las personas que estaban cortando el consumo de grasas, pero no pretendían perder peso, por lo que continuaron consumiendo una cantidad normal de alimentos”, dijo el Dr. Lee Hooper, que dirigió la investigación. “Lo que nos sorprendió fue que perdieron peso, su índice de masa corporal disminuyó, adelgazaron la cintura y, además, mantuvieron el peso durante al menos siete años. Cuanto menos grasa consumimos, menos grasa tendremos que quemar después”.
“El estudio recomienda reducir la ingesta de alimentos altos en grasa, como los quesos, chocolates, carnes, papas fritas, pastelería”
El estudio recomienda, finalmente, reducir la ingesta de alimentos altos en grasa, como los quesos, chocolates, carnes, papas fritas, pastelería, manteca y otros snacks y carbohidratos grasos. Sólo con estas modificaciones, los investigadores descubrieron que se puede empezar a ver grandes resultados.
Los investigadores creen que sus hallazgos podrían desempeñar un papel en las recomendaciones dietéticas para ayudar en la batalla contra la obesidad en todo el mundo. La OMS y otras organizaciones de salud pública dicen que la obesidad es un importante factor de riesgo para la presión arterial alta, enfermedades cardiovasculares, diabetes, algunos tipos de cáncer y los trastornos tales como la osteoartritis, una enfermedad altamente incapacitante por degenerativa de las articulaciones.
Fuente: La Nación – Argentina