Recientemente en Afganistán fueron grabadas unas imágenes que han provocado reacciones múltiples por su brutalidad y también por su primitivismo.
Las imágenes habrían sido grabadas con un móvil y en ellas se puede ver como una mujer que está de rodillas, es asesinada de varios balazos por un hombre que recibe el arma de otros que lo acompañaban.
La mujer fue identificada como hija de Sar Gul y hermana de Mostafá y era la esposa del hombre que la mató, Juma Khan. Su crimen fue haberse escapado con otro hombre: Zemara.
Esta es la síntesis de la información que acompaña las imágenes que resultaron impactantes e incluso provocaron protestas por haber sido mostradas en público.
En el momento del asesinato los hombres que acompañan al marido engañado coreaban: Alá es el más grande y Larga vida al Corán, haciendo una plena confesión de sus creencias.
Los hechos ocurrieron en Parwan una población situada a unos 200 kilómetros de la capital Kabul y adquirieron gran importancia, por el momento político en el que se verificaron.
En Tokio se estaba realizando una reunión en Tokio para conseguir fondos para que Afganistán pueda fortalecer las normas democráticas, luego de la retirada de las fuerzas que colaboran con el gobierno.
Precisamente uno de los propósitos fundamentales que tendrá la asignación de los fondos conseguidos en Tokio era el de lograr la dignidad de la mujer, cruelmente sometida a hechos como los grabados.
Resulta sorprendente que estos hechos del asesinato de la mujer en Afganistán causaran preocupación por su inoportunidad con relación a la reunión de Tokio.
Además de preocupación provocaron también reacción por la crueldad que reflejaban, pero muy pocos comentaron acerca de su verdadero significado: que en el nombre de Alá se hubiera asesinado a una mujer.
También llama poderosamente la atención el ominoso silencio en el que están sumidos, quienes ante hechos menos relevantes acusan en forma coral a Israel, frente a sus adversarios.
Es que el asesinato de una mujer debe criticado según en qué país ocurra? Es que el asesinato de una mujer debe ser criticado según quién lo cometa? Es que el asesinato de una mujer está consentido según las circunstancias?
Ni los más ásperos defensores de los derechos humanos, ni las feministas, ni los progresistas han dicho una palabra con relación a la ejecución de una mujer por haber sido adúltera.
Las declaraciones del Presidente de Afganistán tildando el crimen de “odioso e imperdonable en la sagrada religión del Islam y las leyes del país” suenan a formales y de compromiso.
Mientras tanto solo cabe esperar que ocurra algún episodio mucho menos importante con Israel, para que los silenciosos cómplices por omisión de este asesinato, levanten sus voces de censura.
Fuentes: AFP – Francia
Diego Acosta García