LOS CAMBIOS

DEVOCIONAL

Un pasaje en el Antiguo Testamento relacionado con Israel, nos muestra como ha sido siempre la relación entre los hombres, individualmente o como nación, con Jehová.

Cuando somos obedientes tenemos bendición, pero cuando dejamos de serlo, sobrevienen las consecuencias de la rebeldía.

En el Libro de Jueces, podemos aprender sobre la apostasía de los israelíes que luego de la milagrosa liberación del faraón egipcio, abandonaron al Eterno y se fueron tras otros ídolos.

Dios utilizó a los Jueces para que los liberaran de las aflicciones de sus enemigos, pero tan pronto como ocurría el cambio, nuevamente se entregaban al servilismo apóstata.

Si aplico esto a mi vida, podré comprender mejor a Israel y también podré entender mejor todo lo que me ha ocurrido.

La obediencia resulta fundamental, para poder vivir bajo la Gracia y para poder luchar contra fuerzas que sobrepasan mis limitadas capacidades.

En realidad, mi primera batalla es ser fiel siempre, porque mi gran enemigo, tal vez esté en mi interior.

Jueces 2:22

Para probar con ellas a Israel,
si procurarían o no seguir el camino de Jehová,
andando en él,
como lo siguieron sus padres.

Juízes 2:22

Para por elas provar a Israel,
se hão de guardar o caminho do Senhor,
como seus pais o guardaram,
para por ele andarem ou não.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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SIN REY

DEVOCIONAL

La Biblia es una fuente inagotable de Sabiduría, cuando la leemos con atención y esperando que el Espíritu Santo nos revele, aquello que tiene de especial para nosotros.

Así lo entendí, leyendo un pasaje del Libro de Los Jueces, donde se pueden apreciar dos situaciones opuestas: La Misericordia de Dios y los malos resultados que surgen de hacer la propia voluntad.

Impresiona apreciar como el Eterno tuvo una grandiosa actitud de Amor hacia la tribu de Benjamín y la rehabilitó y permitió a sus hombres que reedificaran sus ciudades y vivieran en ellas.

Pero como eran tiempos difíciles, la falta de un rey facilitaba que cada uno viviera como le pareciera mejor. No es lo mismo que ocurre en nuestros días?

No es que falten autoridades, sino lo que falta es el reconocimiento hacia el Rey de Reyes, que es la auténtica Soberanía sobre los hombres.

Pienso que en mi caso, no es la falta y reconocimiento al Rey, lo que me impide ser mejor. Tal vez, porque me sea necesario estudiar más la Palabra de Dios y confiar más en sus enseñanzas.

Jueces 21:25

En estos días no había rey en Israel;
cada uno hacía lo que bien le parecía.

Juízes 21:25

 Naqueles dias, não havia rei em Israel,
porém cada um fazia o que parecia reto aos seus olhos.

Diego Acosta / Neide Ferreira

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EXHIBIRSE

Desde mis primeros tiempos como creyente, me sorprendió ver la cantidad de hermanos que se exhiben o buscan exhibirse en aquello que hacen en la congregación.

Y lo más triste, es que en ese mostrarse también compiten, como si ignoraran que cada uno tiene su Propósito, diferente y exclusivo con relación a cualquier otro.

Con relación a esto, lo primero que he intentado es guardar mi corazón para tratar de no destacar  en el servir, ni para ser o tratar de ser mejor que nadie.

He aprendido que la verdadera Honra, solo el Eterno la concede. Por tanto contentarse buscando la honra de los hombres, tiene su paga. No en el Reino, sino aquí en la tierra.

Jueces 9:9

Mas el olivo respondió: ¿He de dejar mi aceite,

con el cual en mí se honra a Dios y a los hombres,

para ir a ser grande sobre los árboles?

Juízes 9:9

Porém a oliveira lhes disse: Deixaria eu a minha gordura,

que Deus e os homens em mim prezam,

 e iria a labutar sobre as árvores?

Diego Acosta / Neide Ferreira

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MIEDO…?

Creo que todos podemos recordar a personas que teniendo grandes dones y talentos, tienen dificultades para ponerlos en acción.

En que radica el problema?

Tal vez en el miedo que tienen de que alguien les arrebate aquello que es de ellos, aquello que creen que es uno de los grandes logros de su vida.

Comprendo esta situación porque en los primeros años de convertido, albergaba un sentimiento parecido con relación a mi lugar en la congregación.

Es más: Tenía un fuerte miedo a que ese lugar que ocupaba y que tanta alegría y vanidad me producía, pudiera ser entregado a otro miembro de la Iglesia.

Comprendo esto que hacía, porque a pesar de mis afirmaciones, todavía no tenía en mi corazón la idea de que la más grande obra que podemos hacer los hijos de Dios…es servir.

Como sirvió Jesús!

Todo lo demás carece de importancia, porque los títulos y los honores son tan temporales como los hombres que los otorgan.

El único miedo que debemos de tener, es a perder la honra que solo el Eterno concede!

Jueces 9:9

Mas el olivo respondió:

¿He de dejar mi aceite, con el cual en mí se honra a Dios y a los

hombres, para ir a ser grande sobre los árboles?

Juízes 9:9

Porém a oliveira lhes disse:

Deixaria eu a minha gordura, que Deus e os homens em mim prezam,

e iria a labutar sobre as árvores?

Diego Acosta / Neide Ferreira

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