Y SI ES NECESARIO…

Se cuenta que pocos años después de iniciado el proceso de la Reforma un maestro le dijo a su discípulo al despedirlo: Ve y predica… y si es necesario habla.

La historia breve y contundente nos debe hacer reflexionar acerca de la necesidad de observar como son nuestras actitudes cuando estamos en presencia de otras personas.

Puede ocurrir que con un simple gesto amistoso, un gesto considerado, un gesto solidario, podamos impactar a otras personas y generar hacia nuestra fe una atracción importante.

Hemos sido mandados a cumplir la Gran Comisión y debemos entender que también podemos predicar con nuestras actitudes y que muchas veces no tendremos oportunidad de hablar.

Y lo que es más importante: que nuestras actitudes hablen por nosotros, para así poder extender el mensaje del Reino hasta los confines de la tierra y a todos los hombres.

Recordemos que si es necesario… hablemos, pero mientras tanto que nuestras actitudes reflejen que nos sentimos hijos amados de Dios y que deseamos que ese mismo amor lo puedan recibir en sus vidas los hombres y mujeres con los que nos cruzamos en nuestro cotidiano devenir.

Filipenses 3:17

Diego Acosta García

Deja una respuesta