ESFUÉRZATE


Cuando los israelíes estaban construyendo el segundo templo, tras la destrucción del que levantó Salomón, padecieron de desánimo.

Estaban atribulados porque el nuevo templo no tendría la grandeza ni la magnificencia del que levantó el hijo de David. Entonces Jehová habló por boca de su profeta Hageo.

Exhortó a Zorobabel, a Josué hijo de Josadac y a todo el pueblo, para que trabajaran con nuevo ánimo, porque Él estaría con ellos en todo el tiempo de la construcción.

Si aplicamos este momento de la historia de los israelíes a nuestra vida, deberemos recordar que siempre el Eterno estará con nosotros mientras trabajemos para el Reino.

No nos abandonará nunca en cada momento de la grandiosa tarea que tenemos por delante. Como no abandonó a los israelíes a pesar de su desobediencia.

Nadie debe pensar que hará nada sin la ayuda y complacencia del Señor, pero nadie hará nada sin que la bendición del Señor lo acompañe.

Debemos guardarnos de toda forma de impureza para que el cuidado del Eterno se extienda sobre todos nuestros hechos y así poder levantar la obra que se nos ha encomendado.

Que el desánimo no nos inquiete ni nos haga perder el rumbo. Todo lo contrario. Pensemos en las promesas de Dios y obremos!

Hageo 2:19
Diego Acosta
Música: Neide Ferreira
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