INTERPRETACIÓN

Studium


Si comparamos las opiniones sobre distintos pasajes de la Palabra de Dios, comprobaremos algo que nos afecta en forma directa.

La Biblia no es complicada!

El Texto es sencillo, los complicados somos los hombres!

Dos conclusiones que nos colocan ante la evidencia de pensar por qué intentamos transformar en difícil, lo que es claro y directo?

Quizás esto forme parte de lo compleja que es la naturaleza humana, sin excluir a nadie y afectando a todos.

Salvo aquellos casos en los que por Gracia recibimos palabra profética, en todos los demás, buscamos ser diferentes, distintos, apelando a interpretaciones a veces casi absurdas, de la Palabra.

Se podrá hablar de algunos pasajes de Ezequiel, de Daniel o de Apocalipsis, pero nos olvidamos que los tres son la Voluntad del Soberano, que los conozcamos.

Saber en profundidad lo que en cada caso se nos ha mostrado, también forma parte de la Voluntad del Eterno y por eso debemos ser cuidadosos en lo que escudriñemos y en lo que comentemos.

Tal vez nos sería mucho más provechoso si fuéramos a aquellos pasajes en donde con rotundidad sabemos lo que se ha querido expresar.

Un ejemplo: Jesús no dio explicaciones cuando les dijo: Sígueme…a algunos de los que serían sus discípulos. Hace falta interpretar? No, sencillamente obedecer.

En algunas ocasiones este afán de interpretar lo que puede resultar difícil, no parece más que una coartada para no aceptar lo más sencillo y aceptar lo que se nos manda.

Tengamos cuidado con nuestro afán de saber. Nos puede hacer perder lo fundamental de la relación con Dios: Obedecer y vivir bajo su Gracia!

Éxodo 21:1

Diego Acosta / Neide Ferreira

www.septimomilenio.com