CONFIAR

CONFIAR

DEVOCIONAL

En los momentos difíciles que todos tendremos, con absoluta seguridad, es necesario no perder el fundamento de nuestro llamado. 

Abraham esperó durante muchos años el cumplimiento de la promesa hecha por Jehová relacionada con su paternidad. Es verdad que tuvo su hora de flaqueza, pero Dios conocía su corazón y fué fiel hasta darle a su hijo Isaac.

 

Moisés recién a los 80 años fue instrumento del Todopoderoso para sacar a su Pueblo de Egipto y a pesar de sus dudas e incluso de su problema para comunicarse, tuvo la honra de ser uno de los hombres mayores de Israel.

En el tiempo de la duda, me animo recordando lo enseñado en la Palabra de Dios, de que siempre sus Propósitos se cumplen en su tiempo y a su modo y a veces a pesar de nuestra propia incredulidad.

Y bien cabe recordar a Noé que durante más de un siglo soportó ser tomado por loco o fantasioso, mientras ejecutaba la orden de Jehová de construir un Arca para ser salvado del Diluvio con el que castigó su Creación.

Estos hombres tienen en común que de maneras diversas supieron que debían perseverar con Confianza, esperando que lo prometido fuera una realidad en sus vidas. Sabiendo que no soy perfecto, solo confío en quién me ha dado la Vida.

Salmo 55:23 Mas tú, oh Dios, harás descender aquellos al pozo de perdición. Los hombres sanguinarios y engañadores no llegarán a la mitad de sus días; Pero yo en ti confiaré.

Diego Acosta / Neide Ferreira

BUEN NOMBRE Y HONOR

BUEN NOMBRE Y HONOR

DEVOCIONAL 

Recuerdo que cuando era niño había una frase que parecía sintetizar no sólo una forma de vida sino también un objetivo fundamental para tener como una especie de bandera.

Esa frase era: Defensa del buen nombre y honor…y por esas palabras se contaba que incluso en un pasado más o menos reciente se habían registrado duelos e incluso hasta muerte en ellos.

Luego del maravilloso encuentro con el Señor, este recuerdo parece imposible que sea parte de mi memoria infantil, pero eso era lo que se decía y lo que se buscaba practicar.

Había gente sensata que afirmaba que no todos los que defendían el argumento, tenían buen nombre y mucho menos honor. Y seguramente eso se aproximaba más a la realidad.

Tengo la certeza que tanto una cosa como la otra carecen de todo sentido, si provienen de otros hombres y que lo único que es deseable es el reconocimiento del Dios Todopoderoso.

Todo lo demás es un refugio mundano, para ocultar las miserias o para justificarlas, tratando que los demás miembros de la sociedad, no se enteren o no se percaten de esa penosa forma de vivir.

La honra es la que el Señor nos concede!

Jueces 9:9 Mas el olivo respondió: ¿He de dejar mi aceite, con el cual en mí se honra a Dios y a los hombres, para ir a ser grande sobre los árboles?
Diego Acosta / Neide Ferreira

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CREER o no CREER…

DEVOCIONAL 

Con gran desconcierto un amigo comentaba como su esposa que había sido sanada en Nombre de Jesús, había vuelto a recaer y además se encontraba peor que antes.

¿Qué había pasado?
No tenía poder la Sanidad en el Santo Nombre?
Por qué esa mujer había recaído con tanta dureza?

Estas preguntas  me hicieron reflexionar profundamente, porque afectaban incluso mi propia confianza en el Hijo de Dios. Pero el Espíritu siempre nos ayuda cuando lo invocamos para resolver situaciones tan complejas.

O para aclarar qué había pasado con esta mujer que fue sanada y de pronto volvieron sus dolores, peores,  porque no solo su cuerpo era el sufriente sino también su espíritu porque las dudas también la estaban atormentando.

Lo ocurrido era tan simple como que la mujer había dudado de la Sanidad que había recibido milagrosamente, pensando sobre si le volverían los atroces dolores que la hacían padecer.

En el fondo se trata de algo tan simple y tan definitivo, como creer o no creer. Si tenemos confianza en el Poder de Jesús para sanarnos o si pensamos que puede ser eficaz en un determinado momento y que luego todo volverá a lo de antes.

Cada uno debe responder a la gran cuestión: creo o no creo…

Marcos 9:23
Diego Acosta / Neide Ferreira

LA BUENA DECISIÓN

LA BUENA DECISIÓN

DEVOCIONAL 

Si tuviéramos que optar, siempre preferiríamos ser un árbol robusto y frondoso que un modesto junco, por ejemplo. Todos deseamos ser más y no ser menos, aunque de elementos de la naturaleza se trate.

 

Rara vez pensaríamos que un árbol pierde sus hojas, se puede ver abatido por la fuerza de un viento huracanado o también diezmado por las necesidades de los hombres, que lo cortarían de raíz para utilizar su tronco.

En cambio el junco en su modestia, sí que es capaz de enfrentarse a los vientos por furiosos que sean o también podrían soportar el aumento de las aguas que hasta lo pueden sumergir.

Esto demostraría que muchas de nuestras decisiones están fundadas en lo aparatoso o lo llamativo, y casi nunca en verdaderas razones. Podríamos creer que obrar de esta manera es propio de nuestra especie, que está por encima de todas las Creadas.

Las falsas creencias nos llevan a cometer errores que luego lamentaremos, porque no todos podemos ser árboles ni todos podemos ser juncos. Es Dios quién toma las decisiones.

No nos dejemos engañar por nuestros sentidos y estemos alertas a lo que se haya dispuesto para nuestra vida. No anhelemos ser más ni temamos ser menos. Anhelemos Su Decisión.

Proverbios 16:33

Diego Acosta / Neide Ferreira

LA BUENA Y LA MALA

LA BUENA Y LA MALA

DEVOCIONAL 

La soledad ha sido desde que el hombre ha decidido vivir junto a otros seres formando parte de una sociedad, uno de los grandes problemas personales…quizás tan viejo como la decisión de agruparse.

El gran escritor Jorge Luis Borges, escribió magistralmente sobre el tema, definiendo que había una soledad buena que era la deseada y otra mala, que era la que no deseábamos.

Dios cuando vio que Adán estaba solo, siguiendo con su Plan, creó la mujer para que fuese su compañía idónea. No nos debemos abandonar a la desesperación con la soledad, porque el Eterno, siempre está preocupado por nosotros.

Él sabe nuestras necesidades, incluso antes que nosotros mismos, pero también es verdad, que cada solitario debe tratar de saber las razones de su condición y entonces volverse a Dios clamando por una solución.

No pensemos que si nos consideramos abandonados por quienes deberían cobijarnos, no tenemos ninguna salida…El Santo de Israel prometió que estará a nuestro lado hasta el fin y esa es nuestra mejor compañía!

 

Isaías 35:6
Entonces el cojo saltará como un ciervo, y cantará la lengua del mudo; porque aguas serán cavadas en el desierto, y torrentes en la soledad.
Diego Acosta / Neide Ferrreira

QUIÉN ERES TÚ?

QUIÉN ERES TÚ?

DEVOCIONAL

Que responderíamos si alguien nos hiciera esta pregunta: Quién eres tú? Habría tantas contestaciones como existimos, pero el verdadero fondo de la cuestión seguiría sin resolverse.

Yo diría, por ejemplo que trato cada día de superar mi pasado y verdaderamente convertirme en un hombre nuevo, aunque los resultados sean mínimos por no decir imperceptibles.

Sabiendo que cada testimonio tiene su valor y por supuesto su origen, mi testimonio es o puede ser común, al de muchas personas que se esfuerzan, que luchan denodadamente por cambiar.

Y cambiar significa modificar las conductas incorrectas, las cosas que aprendimos y que deberíamos ignorar por erradas o todo aquello que es producto de la influencia del mundo en mi vida.

Este punto quizás sea el más grave inconveniente para realmente mudar mi mente, porque la seducción del mundo es muy grande y los atractivos con los que somos engañados, son muy poderosos.

Razón por la que vamos de un lado para otro, sin seguir un rumbo definido y vamos aceptando que hoy se nos diga algo y mañana aceptamos que se nos afirme lo contrario, generando una incertidumbre o desconcierto que al final, estoy aceptando como una forma de vivir.

Que triste es esta realidad y me puedo imaginar como ofenderá al Padre, que un hombre que fue elegido para ser discípulo de su Hijo, no sea capaz de cambiar de vida y ser lo que debe ser.

Proverbios 25:14
Como nubes y vientos sin lluvia, Así es el hombre que se jacta de falsa liberalidad.
Diego Acosta / Neide Ferreira

ESTAR SOLO

ESTAR SOLO

DEVOCIONAL

La dolorosa realidad de percibir que se está solo en el mundo, es una realidad en la vida de muchas personas que se niegan a aceptar que existe una posibilidad de cambiar la tristeza por la alegría.

 Este cambio sólo se logrará abandonando la actitud de negar la existencia de Dios y negándose a la vez, de recibir su maravilloso Consuelo y Amor, tan grande que resulta casi inimaginable.

Sentirse solo y luchar solo contra las adversidades de la vida, solo lleva a la frustración y también a la rebelión contra quienes nos rodean, por considerarlos parte del problema que nos afecta.

La soledad no es buena para nadie y así lo entendió el Todopoderoso con Adán en el Paraíso, siendo como era un lugar maravilloso pero con un vacío fundamental en la vida del primer hombre.

Abandonemos la terquedad de negar al Supremo y tengamos la humildad de reconocer nuestra debilidad, para transformarnos en un hombre nuevo y quién dice hombre obviamente dice mujer.

Luchemos ante las adversidades del mundo, bajo la protección del Poder de Dios. Solos, ya lo hemos comprobado, no podremos lograr más que derrotas y sembrar nuestro corazón con la semilla de la amargura.

Job:36:5

He aquí que Dios es grande, pero no desestima a nadie; Es poderoso en fuerza de sabiduría.

Diego Acosta / Neide Ferreira